En un partido en el que las emociones llegaron en el segundo tiempo, Boca festeja un nuevo campeonato. Sacó un poquito de ventaja en los 90 minutos de juego porque desde el gol de Cardona (un zapatazo tremendo que se clavó en el ángulo de Arboleda) se sentía tranquilo y se veía alzando la Copa Diego Maradona. Banfield no salía de su rutina y los minutos corrían. Una final con pocas llegadas a las áreas y con poco peligro de gol. Pero la expulsión por doble amarilla de Emanuel Mas empezó a preocupar a Boca. Y las lesiones de Cardona, Campuzano y el Pulpo González también debilitaron al equipo.
El Taladro de Sanguinetti se despertó consiente de que esas bajas en Boca podían significar una oportunidad y fue a buscar el empate. Lo encontró al final de todo, en el último de los 5 minutos adicionados. Eso obligaba a definir por penales.
Con los 5 penales convertidos (Tévez, Villa, Salvio, Izquierdoz y Buffarini el que significó el campeonato) y por el penal errado por Jorge Rodríguez para Banfield, Boca tuvo un cierre de temporada feliz, pese a que su principal objetivo que era la Copa Libertadores quedó en el camino.
En un campeonato atípico, organizado por la emergencia de la pandemia, la Copa Maradona se va a las vitrinas de La Boca. Seguramente a Diego le alegraría este resultado. | 
