A pesar de los intentos de la empresa por que se declare inexistente la huelga, las y los trabajadores de Interjet continúan en lucha por la defensa de sus derechos laborales.
Se cumplen once días desde que las y los trabajadores de Interjet resolvieron estallar la huelga en exigencia del pago de salarios, con una votación en donde el 63% de sus integrantes estuvieron a favor de la medida. Los trabajadores, agremiados en la sección 15 de la Confederación de Trabajadores de México, denuncian asimismo la violación de su Contrato Colectivo de Trabajo.
Por toda respuesta a los justos reclamos de los trabajadores, apoderados legales de la aerolínea, propiedad de Miguel Alemán Magnani, nieto del expresidente Miguel Alemán Valdés e hijo del exgobernador de Veracruz Miguel Alemán Velasco, empresario y accionista de Televisa, presentaron un recurso ante la Junta Federal de Conciliación y Arbitraje (JFCA) con el que solicitaron declarar inexistente la huelga.
De acuerdo con los trabajadores, la empresa no se ha manifestado de otra forma ni se ve claridad sobre cómo pagarán a sus empleados el adeudo de ocho quincenas de sueldo, así como prestaciones como aguinaldo, fondo de la caja de ahorro, vales de despensa y cuotas en servicios de salud y vivienda. Cabe destacar que desde el 11 de diciembre pasado Interjet suspendió vuelos y afectó a cientos de usuarios, por lo que actualmente también enfrenta decenas de denuncias ante la Profeco.
El sector aeronáutico ha sido uno de los más golpeados por la crisis económica agudizada por la crisis sanitaria, con pérdidas reportadas de hasta 230 millones de dólares al día en 2020. Sin embargo, mientras la empresa buscó declararse en bancarrota y otras medidas para salvaguardar sus intereses, descargó los costos de la crisis sobre sus trabajadores, suspendiendo el pago de prestaciones y salarios. Esta situación, que se agravó con las condiciones en las que son obligados a trabajar cientos de empleados del sector, derivaron en el llamado a estallar la huelga.
Como decimos aquí: "Los problemas que ahora dicen enfrentar las aerolíneas -a decir de los patrones—, sobre la imposibilidad o la inviabilidad financiera (en términos de las ganancias decrecientes) para pagar salarios y prestaciones, ponen en cuestión la administración empresarial de estos servicios, lo que abre la posibilidad de debatir sobre la necesidad de la nacionalización de los sectores que están declarándose en bancarrota, bajo control de sus trabajadoras y trabajadores organizados democráticamente, para no quedarse sin su fuente de trabajo."
Ante el silencio de la UNT, que agremia distintas organizaciones sindicales de trabajadores aéreos, así como de la charra CTM, la lucha por la independencia política de los trabajadores y por la unidad expresada en un Encuentro Sindical de Lucha, es urgente. Asimismo es indispensable desplegar una política de solidaridad activa con la huelga de Interjet a la voz de ¡Ni una lucha aislada más!