Durante los últimos días, la Contraloría entregó los resultados de una investigación realizada a la Subsecretaría de Redes Asistenciales sobre la implementación del “Hospital Digital” impulsado por el gobierno, donde se arrojaron una serie de irregularidades en la ejecución de recursos, licitaciones y contratación de personal, como la compra de 22.055 licencias software por $3.238.517.828, de las cuales se utilizaron menos de 50, cantidad necesaria para una etapa piloto

El Hospital Digital del Ministerio de Salud, fue el proyecto estrella en medio de la llegada del coronavirus al mando de Emilio Santelices, el cual tenía como objetivo entregar información y servicios de salud vía remota.

Hace unos días atrás, la Contraloría dio a conocer los resultados de una investigación realizada a la Subsecretaría de Redes Asistenciales la cual arrojó una serie de irregularidades en la ejecución de recursos, licitaciones contratación de personal durante su desarrollo.

El resultado de la Contraloría

Los resultados de la Contraloría señalan que “para el proyecto se compró servicio Big Data por $18.445.472. Pese a ello, la iniciativa estuvo suspendida por nueve meses sin que se justificaran la falta de implementación, generando una subutilización de la plataforma”.

“Minsal proyectó 1.021.441 consultas médicas mediante Hospital Digital, pero sólo se concretó el 2,7%, incumpliendo el principio de eficiencia y eficacia”. Así como un nulo avance en el cumplimiento de las metas de producción, “Es posible advertir que el porcentaje de cumplimiento, al 30 de septiembre de 2019, era de un 2,7% de la meta de producción para el año 2019 presentada al MIDESO (Ministerio de Desarrollo Social), pues, como se indicó, las interconsultas alcanzaron a 27.393 sobre una proyección de 1.021 441”, establece el reporte.

Uno de los resultados de la Contraloría que más llamativas, resulta ser la implementación “el Minsal adquirió 22.055 licencias de software por $3.238.517.828, de las cuales se utilizaron menos de 50, cantidad necesaria para una etapa piloto”.

Estos resultados son gravísimos, mientras se colapsa la salud pública el gobierno decide seguir mal distribuyendo los recursos públicos en privados, la situación del Hospital Digital se transforma en un nuevo escándalo, que como hemos visto ha significado un proyecto desastroso mediante la inversión de miles de millones de pesos en un proyecto que no cumplió con el mínimo de los objetivos, es más, muchos de los gastos que se realizaron ni siquiera fueron evaluados previamente al momento de su incorporación. Esto, se suma a la firma de contratos con entidades privadas por parte del gobierno para supuestamente abrir espacios de atención para el covid19 que nunca fueron utilizados y si así lo hicieron su uso fue muy bajo como espacio Riesco o el Hotel O’higgins.

El saqueo a la salud

Mientras el sistema de salud está con el colapso de las camas críticas y con traslados de pacientes entre regiones, el no pago del bono Covid a algunos trabajadores y trabajadoras de la salud, las contrataciones precarizadoras como el servicio de honorarios, el gobierno continúa poniendo el foco en proporcionar ganancias a privados como lo ha sido el Hospital Digital.

El colapso inminente del sistema de salud fue una advertencia desde el principio de la pandemia hacia el gobierno, pero las medidas fueron totalmente insuficientes, sumado a la pésima distribución de recursos en salud, propiciando el pago de espacios de atención inutilizados a privados o el ahora gravísimo caso del Hospital Digital. Hemos visto a trabajadoras y trabajadores de la salud exigiendo mejores condiciones en los recintos hospitalarios e insumos para enfrentar la pandemia, la que actualmente tiene a miles de fallecidos, queda en evidencia a donde han apuntado las prioritarias políticas gubernamentales.

Frente a este nuevo saqueo a la salud pública, es que debemos apuntar a luchas por un sistema de salud que sea único, universal y gratuito, para que sea el Estado el cual se haga cargo de los centros de salud y detenga este negocio empresarial con la salud de todas y todos.