La noticia de un nuevo femicidio volvió a impactar en la escena nacional. Las mujeres volvieron a salir a las calles para denunciar la brutalidad de la violencia machista, avalada por el Estado. Como denunciaron familiares de Úrsula, ella había realizado la denuncia 18 veces y no fue escuchada. Finalmente su pareja, policía, la asesinó. Cuando amigos y familiares fueron a reclamar justicia, recibieron represión como única respuesta.
En Rosario se realizó una concentración para exigir justicia y se denunció el rol de la policía reprimiendo la manifestación así como también el rol del Estado cómplice. Además se pidió la implementación de una ley de emergencia nacional para prevenir la violencia hacia la mujeres.
Daiana de la Secretaría de Género y Disidencias de la Facultad de Humanidades y Artes, y miembro de Pan y Rosas exclamó: "Nos hacemos presente porque una vez mas la violencia machista nos obliga a gritar Ni una menos. Queremos justicia para Úrsula. El caso de Úrsula como de la gran mayoría de femicidios demuestra la responsabilidad del Estado y de los gobiernos en reproducir permanentemente la violencia hacia las mujeres. Está demostrado que el patriarcado no se acabó como dijo Alberto, sino que se mantiene en las mismas arcas del Estado, como es el caso de la policía que encima reprime el pedido de justicia. Una verguenza. Es urgente la implementación de una ley nacional para prevenir la violencia machista, algo paliativo que ni siquiera está contenido en el presupuesto votado a la medida del FMI. Por eso sostenemos que la pelea es seguir organizándonos, saliendo a las calles, siendo miles, así como conquistamos el aborto decididas y movilizadas, para terminar con toda la violencia hacia las mujeres y disidencias". |
