Cientos de trabajadores y trabajadoras de la educación se movilizaron este miércoles a la Casa de Gobierno provincial para denunciar que Suarez pretende imponer la vuelta a clases presenciales sin garantizar condiciones mínimas de salubridad para la comunidad educactiva
Cientos de trabajadores y trabajadoras de la educación se movilizaron este miércoles a la Casa de Gobierno provincial para denunciar que Suarez pretende imponer la vuelta a clases presenciales sin garantizar condiciones mínimas de salubridad para la comunidad educactiva y rechazar el aumento por decreto, el cual queda muy por debajo de la inflación.
Tanto docentes como celadores y celadoras denuncian que el Gobierno provincial y la DGE pretenden imponer la vuelta a clases presenciales sin garantizar mínimas condiciones sanitarias para trabajadores y trabajadoras de la educación y estudiantes. "Esta semana retornamos a aulas que no son seguras. Somos los primeros y primeras interesadas en volver al aula, pero queremos que ese sea un espacio seguro para nuestros estudiantes y sus familias", expresó tras el acto Laura Espeche, secretaria de Acción Social del Sute.
Espeche, además añadió que "nos movilizamos por nuestro salario y para decirle NO al decreto del gobernador. Esperamos que en cada escuela se pueda debatir en asambleas, en plenarios, como construimos un gran paro provincial".
De la convocatoria también participaron trabajadoras de la Terre, fábrica recuperada que viene luchando contra la amenaza de desalojo, y referentes de otros sindicatos como Sadop (docentes de escuelas privadas).
La situación en las escuelas hace que sea insegura la vuelta a la presencialidad para toda la comunidad educativa. "Quieren que los chicos vuelvan al aula en escuelas que se llueven y que no tienen agua en los baños para poder lavarse las manos", denunció una de las maestras.
Las y los trabajadores de la educación siguen en pie de lucha, contra el decreto de Suárez que pretende que sean las escuelas quienes paguen el ajuste, con menos infraestructura y salarios por debajo de la Canasta Básica. "En el 2020 el gobierno recortó a la educación $3.200 millones de un presupuesto que cae año a año. Es lo que le deben a toda la comunidad educativa", concluyeron desde el sindicato.