El Gobierno nacional anunciará este viernes la conformación del Consejo Económico y Social. ¿Qué es? Todavía no está muy claro sus atribuciones, que serán planteadas en un decreto presidencial que cuya funcionamiento será “reglamentado” por el Congreso Nacional.
Según trascendió, será “una mesa de trabajo multisectorial” compuesta por 25 miembros, representantes de los distintos sectores.
¿Qué sectores? No están aún los datos concretos, menos los nombres, pero se sabe que este viernes estarán presentes miembros del Gabinete, dirigentes de la Unión Industrial Argentina (UIA) y de la Confederación General del Trabajo (CGT), que son las principales patas del “consejo”. Pero también se invitó especialmente a autoridades religiosas, de distintos credos. Además tendrían lugar, al menos en el lanzamiento, dirigentes de movimientos sociales y sectores académicos.
¿Cómo funcionará? Tampoco trascendió, aunque se sabe que ya tiene presidente. Se trata de Gustavo Béliz, actual Secretario de Asuntos Estratégicos del Gobierno. Su mandato durará cinco años.
La idea fue promocionada por el presidente Alberto Fernández en la Asamblea Legislativa de 2020. Allí planteó que “tenemos que ser capaces, todos juntos, de diseñar la agenda de futuro. Quiero desplegar esos cauces, propiciar la llegada de un aire nuevo y renovador”. ¿Se referirá en estos términos a los grupos empresarios o a los dirigentes de la CGT? ¿Quizás a las autoridades de las distintas iglesias?
Además dijo que “implica estar dispuesto a abrir cauces de participación novedosos en nuestro sistema democrático”. ¿Discutir la “agenda del futuro” de un país entre 25 personas elegidas por ellas mismas sería “democrático”?
En una reciente entrevista con Página 12, Fernández dijo que el Consejo servirá para “discutir todo: cómo va a ser el sistema educativo, el sistema de salud, el sistema financiero, las condiciones laborales a largo plazo, etc”. ¿Las condiciones laborales del futuro las definirán entre la UIA y la CGT? ¿Las autoridades religiosas seguirán teniendo injerencia en cuestiones educativas y religiosas?
Uno puede pensar que es “más de lo mismo”, es cierto. Pero este viernes el Gobierno intentará mostrarse como un “articulador” de distintos sectores con mucho poder. Recordemos que en los últimos días realizó reuniones con empresarios del campo, la industria y también con las cúpulas sindicales, donde se discutió un “acuerdo de precios y salarios”. El Consejo, según la idea de Fernández, será el “padre” de esos pactos más coyunturales.
Lo cierto es que la lógica es similar. En una etapa en la que la crisis económica y social se recuesta cada vez más sobre el pueblo trabajador, son distintas recetas para sellar pactos a las espaldas de millones, los más interesados en las cuestiones educativas, sanitarias o laborales.
Entre la certeza, como decíamos, está confirmado que Gustavo Béliz será el capitán. Por nada menos que cinco años.
Béliz es un allegado al Presidente, desde hace años. Juntos fueron funcionarios de Menem, estuvieron en el partido de centroderecha Nueva Dirigencia y luego fueron aliados de Domingo Cavallo. También coincidieron en el gobierno de Néstor Kirchner.
Además es un hombre muy allegado a la Iglesia Católica, y en especial a sus sectores más conservadores. Por eso se lo conoce como “cooperador” del Opus Dei.
Pero también tiene relación con otras religiones. Hace pocos días se reunió con autoridades de la Conferencia Episcopal Argentina, la DAIA, Iglesias Evangélicas y otros cultos. Al salir dijo que "fue una reunión preliminar porque se pone en marcha el Consejo Económico y Social y las representaciones religiosas tienen un lugar”.
Una “mesa de trabajo” entre cuatro paredes, conducida por allegados a Techint, la Sociedad Rural, Cavalieri y los jefes religiosos, conducidos por un ex funcionario de Menem ultracatólico, no parece un aire fresco, democrático y renovador para las grandes mayorías. |