Con un corte en Av. Centenario, concluyó la concentración de mujeres en Tribunales, que en el marco de las movilizaciones que se hicieron en todo el país exigiendo Justicia por Úrsula, destapó la bronca que tenemos decenas sobre la impunidad y el encubrimiento estatal.
Este miércoles 17, en el marco de las movilizaciones que se realizaron a lo largo del país por el femicidio de Ursula a manos de un efectivo de la Bonaerense, decenas de mujeres se concentraron en los Tribunales de San Isidro.
Participaron también de la convocatoria familiares de Viviana Altamirano, joven desaparecida en Pacheco; de Micaela Fernandez y Luna Ortiz victimas de femicidio.
“Es terrible que siga pasando esto, que no se nos respeten nuestros derechos, que haya un montón de denuncias y no se haga cargo nadie, que la justicia que nos tiene que proteger no esté de nuestro lado. El mismo día del femicidio Kicillof tuiteaba que le iba a dar un aumento a la policía, super frío. Nos preocupa que se empiece a normalizar estas situaciones, o que dejen de movilizarse. Cada vez que haya un femicidio nosotras tenemos que volver a salir a las calles” nos decían Dana y Priscila, dos jóvenes de la zona que se acercaron a participar.
Agustina, de la Agrupación de mujeres de Pan y Rosas, y nos comentaba: “tenemos que cambiar las cosas, Ursula hizo todo lo que nos dicen que tenemos tenemos que hacer y aun así nadie la escuchó. No es solo la policía y la justicia, el Estado es responsable. No puede ser que el FMI se lleve millonada de plata mientras el presupuesto para combatir la violencia de género está re desfinanciado. Eligen más patrulleros en vez de más refugios para mujeres en situación de violencia, como lo dejaron bien claro Kicillof y Berni solo un día después de que mataran a Ursula. Tenemos que seguir organizadas en las calles y pelear por un verdadero plan nacional contra la violencia de género”.
El caso de Ursula deja al descubierto la responsabilidad que tiene el Estado con su justicia y fuerzas represivas profundamente clasista y patriarcal. A menos de un mes para el 8M, tenemos que discutir cómo seguir la pelea. La única manera de combatirlo es organizadas y en la calles.