En las últimas horas se viralizó un video de una joven de 27 años, cuñada del titular de la Secretaría de Desarrollo Social, Salud y Ambiente de la ciudad y empleada administrativa de la cartera, intentando justificar porque se aplicó la vacuna pese a no pertenecer a grupos de riesgo.
Después del escándalo del vacunatorio vip donde amigos del poder político y económico pudieron acceder a la vacuna mientras la población sigue con la incertidumbre de no saber cuanto más deberá esperar, siguen apareciendo nombres.
Claudia Centurión es empleada administrativa en la Secretaría de Desarrollo Social, Salud y Ambiente de Gualeguaychú y cuñada de Martín Roberto Piaggio, titular del organismo y como explica en el video recibió una dosis de la vacuna con 27 años y sin pertenecer a ningún grupo de riesgo.
Por supuesto que todos los trabajadores deberían ser vacunados pero se supone se da prioridad a los más vulnerables ya sea por la edad o por padecer enfermedades previas crónicas respiratorias o coronarias. O incluso estar más expuestos como el caso de los docentes que les impusieron la vuelta a las aulas sin garantizar la vacunación y medidas necesarias para una presencialidad segura, lo que se cobró la vida de trabajadores de la educación.
Es cierto que las vacunas que llegan al país no alcanzan para sectores amplios de la población por eso es imprescindible la anulación de las patentes y un sistema único de salud a disposición de las necesidades de la población donde desde la producción hasta la distribución sea controlada por los propios trabajadores y que se organice en cada lugar de trabajo comisiones de seguridad e higiene que controle se cumplan con los protocolos para evitar la propagación del virus.