Luego de apoyar las luchas contra el racismo y el odio a la diversidad, los fandoms se unen para la pelea urgente por el planeta. La influencia del pop coreano en multitudes de jóvenes de mente abierta.
“El cambio climático nos afecta a todos”, dicen desde Kpop4Planet, una nueva plataforma que agrupa a seguidores del pop coreano que quieran sumarse a la batalla. La pelea contra la emergencia climática global ha trascendido fronteras y rubros: están los jóvenes, los trabajadores y hasta los padres “por el planeta”. Ahora fans del K-pop decidieron aprovechar su enorme extensión e influencia para unirse en un alerta sobre la situación y sus consecuencias para la vida en la Tierra.
El movimiento fue creado a mediados de enero por Nurul Sarifah, de 21 años. En diálogo con Reuters, la estudiante de Indonesia explica que los seguidores del K-pop son en su mayoría millennials y de la generación Z. “Queremos pelear por nuestro futuro”, dice Sarifah, seguidora de la banda surcoreana EXO.
Kpop4Planet is for K-pop fans who ❤️ their idols and our 🌏
Climate change affects all of us! join us for #ClimateJustice✊🏽
Con vistas a la cumbre climática COP26, que tendrá lugar en noviembre en Glasgow, Escocia, convocan a sumarse a seguidores de todo el mundo de bandas de pop coreano como BTS, Blackpink, Got7, Monsta X, EXO, Girl’s Generation y Pentagon, entre decenas más. En su sitio web, Kpop4Planet se presenta como un espacio en el que todos los fandoms podrán mostrar “su pasión por la justicia climática”.
El compromiso de artistas también tiene un impacto en la expansión de esta y otras causas: según enumeran en Kpop4Planet, en febrero de este año las integrantes de Blackpink, voceras oficiales de la COP26, llamaron a sus fans a unirse a la acción climática a través de un video en su canal de YouTube, con más de sesenta millones de suscriptores. El video de la banda de chicas alcanzó tres millones de visualizaciones en seis días.
Antes Jinyoung de Got7, Sehun de Exo y Rosé de Blackpink donaron y hablaron en defensa de animales y personas afectados por los incendios forestales en Australia a comienzos de 2020. Ese mismo año, en octubre, las integrantes Weeekly aportaron una canción llamada “My Earth”, en la que hablan del calentamiento global. La banda Red Velvet fue embajadora del Día Internacional del Aire Limpio (ONU) en agosto de 2020, mientras que Paul Kim hizo una donación a la Huelga Mundial por el Clima en Corea en diciembre de 2019.
CedarBough Saeji, especialista en cultura coreana, explica a Reuters que “los fanáticos del K-pop son generalmente de mente abierta y con una mirada hacia el exterior en su acercamiento al mundo. Si no lo fueran, escucharían música de su propio país en su propio idioma local". Con esa perspectiva, el enorme movimiento climático global no podía pasarles por el costado. “Los fanáticos del K-pop han estado a la vanguardia de las iniciativas de justicia social: troleando a Trump, ahogando los hashtags racistas en Twitter, educando a los fans sobre la apropiación cultural y luchando por la justicia climática”, aseguran en el vistoso sitio web de Kpop4Planet.
Entre algunas de las actividades promovidas por fans se encuentran las campañas de donaciones hechas por EXO-Ls, Blinks y ARMY (fans de EXO, Blackpink y BTS, respectivamente) para asistir a los afectados por tifones e inundaciones en Tailandia (2019), India (2019), Filipinas (2020) e Indonesia (2021). Los kpopers australianos también organizaron recaudaciones de dinero debido a los descomunales incendios forestales que consumieron casi veinte millones de hectáreas y afectaron a tres mil millones de animales.
Con habilidad para organizarse en grandes y poderosas comunidades online, a través de las cuales defendieron la lucha antirracista de Black Lives Matter y la pelea por la diversidad sexual, los fans del K-pop quieren aprovechar ese hándicap para esparcir un mensaje de alerta y organizarse por el futuro.
Así lo piensa Kim Na-yeon, una joven de 15 años de Corea del Sur que adora la música de NCT Dream: “Como he sido fan del K-pop durante mucho tiempo, sé cómo la gente se reúne y se mueve en línea, así que estoy usando mis habilidades para nuestra campaña”.
Sin planeta no hay música
En su sitio web, el movimiento de kpopers describe que la crisis ecológica y climática “enferma nuestro planeta” a través de gases de efecto invernadero (GEI), provoca eventos meteorológicos catastróficos y pone en riesgo la vida silvestre. Aunque recomiendan adoptar hábitos amigables con la ecología, como las llamadas tres R (reducir, reusar y reciclar), reconocen que no alcanza con las campañas para adoptar animales en peligro, promover hashtags para salvar bosques o plantar árboles para celebrar cumpleaños de sus ídolos.
Los fandoms dicen que hay que luchar contra la causa: la crisis climática, relacionada directamente con los incendios y la deforestación que se traducen en pérdida de hábitat natural. Llaman a unirse y apoyar iniciativas del movimiento a nivel local para presionar a Gobiernos y corporaciones por políticas climáticas ambiciosas y el abandono de los combustibles fósiles.
“Cada día experimentamos estos efectos: contaminación, olas de calor, inundaciones, incendios. Podemos cambiar esto al hacer el bien, como hicieron nuestros ídolos, así podremos disfrutar del K-pop en un planeta habitable”, señaló la fundadora Sarifah a Reuters.
La COP26 no estará exenta de debates y polémicas. Tras años donde los fenómenos ocasionados por el calentamiento global acelerado y otras manifestaciones de la crisis climática estuvieron expuestos ante los ojos del mundo,los Gobiernos siguen ofreciendo compromisos a largo plazo y lagunas administrativas.
Greta Thunberg, que suele participar de estas cumbres climáticas, reconoce que los Estados son incapaces de tomar medidas drásticas orientadas por la mejor ciencia disponible, que recomienda desde hace décadas la reducción y ahora el freno en las emisiones de GEI a la atmósfera. “La crisis climática y ecológica no puede resolverse sin cambiar el sistema”, dice la fundadora de Fridays for Future.
Los líderes mundiales se reúnen a espaldas de millones que se movilizaron a nivel mundial para pedir un cambio en el sistema y no en el clima planetario. Aferrados al ya limitado y nunca cumplido Acuerdo de París, que en diciembre cumplió cinco años, los Gobiernos, especialmente de los Estados más contaminantes, como China, Estados Unidos y la Unión Europea, siguen con su “business as usual”.
Es precisamente la organización de los movimientos juveniles, como los kpopers, Fridays for Future y otros a nivel mundial, junto a pueblos indígenas y campesinos, sindicatos y científicos comprometidos la que puede torcer el destino que el capitalismo quiere legarle a nuestro planeta.