Más de 1000 personas de 25 estados de Brasil participaron en el plenario de Pão e Rosas (parte de la organización internacional de mujeres Pan y Rosas). Solo a través de la sala Zoom desde donde se realizó la reunión hubo más de 900 personas conectadas, además de las que siguieron el evento a través de Youtube, muchas de las cuales se vieron en grupos. Las distintas intervenciones y propuestas, de las que participaron cientos de mujeres, afrodescendientes, personas LGBT e indígenas, generaron un clima de mucha emoción a lo largo de el plenario virtual que expresaba la necesidad de reunirse y construir un feminismo socialista.
Durante todo el plenario, hablaron mujeres y personas LGBT de Ceará, Rio Grande do Norte, São Paulo, Brasilia, Rio Grande do Sul, Minas Gerais, Rio de Janeiro y muchos otros lugares. Jóvenes, obreras, precarizadas, subcontratadas, docentes o estudiantes, el plenario expresó la vitalidad y la fuerza necesaria en tiempos tan difíciles. La distancia geográfica no logró disipar la energía vibrante presente en los discursos y en las miradas, tan necesaria para atravesar este momento.
Se trató de un verdadero encuentro de generaciones, desde una vieja guardia de lucha de diversos sectores hasta la nueva generación que se está despertando para luchar contra el machismo, el patriarcado y el capitalismo en el Gobierno de Bolsonaro.
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Como dijo Diana Assunção, dirigente nacional de Pão e Rosas y del Movimiento Revolucionario de Trabajadores (MRT), “En tiempos de crisis, guerras y revoluciones, cuando vemos que la pandemia se impone a nuestra clase, esa pandemia no es un jaque mate a nuestra clase, y no nos derrotará. !Bolsonaro y los golpistas no ganarán! Desde las mujeres afroamericanas en los Estados Unidos hasta las trabajadoras textiles en Myanmar, somos la primera línea para destruir el viejo mundo y construir un mundo nuevo, de modo que tengamos derecho no solo al pan sino también a las rosas".
Diana Assunção e Letícia Parks
Letícia Parks, señaló: "Queremos construir un 8 de marzo contra Bolsonaro, Mourão, los militares y todos los golpistas, una lucha que consideramos inseparable de los derechos por los que hemos estado luchando desde hace décadas, como el aborto legal, seguro y gratuito, el derecho a la maternidad, que también es robado a personas en situación de desempleo, con vivienda precaria. Por defender todo esto, se nos prohibió hablar en el acto nacional que ocurrirá mañana 7 de marzo. Para ese acto el PT, PCdoB y PSOL redactaron un manifiesto para expresar su política nacional hacia el 8 de marzo, en el que no hay una sola palabra sobre el golpe [institucional] o sobre Mourão [el vicepresidente militar de Bolsonaro], y por lo tanto la lucha de las mujeres se resume en una solicitud al Congreso, que está lleno de golpistas, para hacer un juicio político [a Bolsonaro] que en el la práctica pondría a Mourão en el poder. Esto no es un detalle menor".
Carolina Cacau
Carolina Cacau, profesora de Río de Janeiro, dijo: "Para nosotras, las feministas marxistas, se trata de organizar a las mujeres, con las mujeres negras a la cabeza, en alianza con toda la clase obrera, no para reformar esta sociedad capitalista, no para esperar las elecciones cada 4 años, sino para derrocar ese sistema. Para que estemos a la vanguardia de la revolución ”.
Alice Caumo, estudiante de UFRGS (Universidad de Rio Grande do Sul)
Andreia Pires, una trabajadora doméstica que hace años lucha contra la opresión y la explotación, habló después de Alice Caumo, una joven artista y estudiante que ha estado haciendo videos feministas y socialistas en Tik Tok. Toda una nueva generación que ahora despierta a la política siguió la charla con emoción, mientras docentes de diferentes estados contaban un poco sobre sus luchas contra la reapertura.
Maria Florguerreira (Txahá Xohã), oriunda de la etnia Pataxó, de Bahía y que actualmente tiene a su Pueblo en las aldeas de Carmésia MG, profesora formada en la UFMG (Universidad de Minas Gerais), expresó en el plenario sus propias vivencias.
Maria Florguerreira (Txahá Xohã)
Tamiris, una trabajadora del metro, nos contó lo que se siente estar en la primera línea todos los días en una metrópolis como San Pablo, así como Babi, una trabajadora del Hospital Universitario de la Universidad de San Pablo.
Maíra Machado, que es maestra en San Pablo, hizo una intervención que se puede ver aquí, en la que señaló: “Ante la situación en nuestro país, denunciamos y peleamos contra Bolsonaro, quien dijo la semana pasada que ’hay que dejar de llorar e ir a buscar la vacuna a la casa de nuestra madre’, pero tampoco caemos en la demagogia de gobernadores como Doria que pusieron a San Pablo en fase roja, pero mantuvieron abiertas las iglesias como un servicio esencial en nombre de las ganancias de los pastores y las escuelas que funcionan para satisfacer a los propietarios de escuelas privadas".
En medio de la pandemia, estamos viendo no solo avanzar el negacionismo asesino de Bolsonaro contra la población, sino también la demagogia de los gobernadores de varios estados al reabrir escuelas de manera insegura y aplicar ataques a los trabajadores.
Maíra Machado
Al finalizar el plenario decidimos una serie de resoluciones que se llevarán a cabo en las próximas semanas. |
