Lo hizo desde la ex ESMA junto a Héctor Daer, máximo exponente de la burocracia sindical traidora. La caza de brujas en Chubut, con detenciones y causas armadas a ambientalistas, es acompañada por el discurso oficial que legitima la criminalización de la protesta social. |
En un acto de verdadera provocación, Alberto Fernández defendió a la patota de la UOCRA que violentó a activistas ambientales durante su reciente visita a Lago Puelo, en el marco de los incendios en la Comarca Andina. Gerardo Martínez, secretario general de la UOCRA, fue colaborador del genocida Batallón 601 durante la última dictadura cívico-militar.
El acto, organizado por Hijos Capital y la Intersindical de Derechos Humanos, se realizó en el predio de la ex ESMA para homenajear a trabajadores desaparecidos en la última dictadura cívico militar. Pudo escucharse a Fernández pronunciar "En Lago Puelo, un grupo de enloquecidos muy chiquito se le ocurrió tirar piedras y había un grupo de compañeros militantes de la UOCRA que en el acto fueron estigmatizados por enarbolar la bandera de un sindicato. Ahora, ¿Quiénes fueron más antidemocráticos? ¿Los que estaban cuidándome o los que tiraban piedras y rompían vidrios?" para también referir en su misma alocución "tenemos que trabajar para construir una sociedad más igualitaria".
Durante la visita de Fernández a Lago Puelo pudo verse a la patota de la UOCRA empujar y violentar a quiénes concentraron. Horas después, las asambleas ambientales de la provincia denunciaron públicamente que hubo infiltrados de la policía así como una fuerte cacería donde el gobernador Arcioni y su ministro Massoni detuvieron a seis ambientalistas el lunes (incluida una menor) y cuatro más en la tarde de ayer. Tal como pudo verse, la campaña de criminalización a quiénes luchan no solo es sostenida por el gobernador Mariano Arcioni y su ministro de Seguridad Federico Massoni, sino por el gobierno nacional del Frente de Todos.
Pero además de hacer una reivindicación pública del patoterismo de la conducción del sindicato de la construcción, Fernández se pasó de cínico al hacerlo en medio de un acto por los 30.000 detenidos desaparecidos y encima junto a Tati Almeyda, Madre de Plaza de Mayo. Provocación es poco, señor presidente. Lo único que logra es sumar un fundamento más a la marcha a Plaza de Mayo y de las convocatorias provinciales del próximo miércoles, como cada 24 de Marzo, contra la represión y la impunidad de ayer y de hoy.
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