Este domingo comenzó un nuevo despliegue de elementos del Instituto Nacional de Migración (INM) y de la Guardia Nacional en la frontera entre México y Guatemala, con el objetivo de impedir el paso de migrantes.
Con este operativo nuevamente el gobierno de López Obrador, como lo hizo el año pasado ante las exigencias de Donald Trump, se pone al servicio de los intereses de la Casa Blanca, ahora habitada por Joe Biden.
Recientemente, el gobierno acordó con Estados Unidos el envío a México de 2.7 millones de vacunas contra Covid-19, por lo que el reforzamiento de la frontera con Guatemala ha sido señalado como parte de la negociación mexicana con el vecino del norte, lo cual rápidamente fue “desmentido”.
Este nuevo operativo antimigrante se produce en momentos en que se vienen incrementando los cruces de migrantes de México a Estados Unidos, en respuesta a las promesas y los gestos de Biden hacia los inmigrantes durante los primeros días de su gobierno, mismos que se han transformado en el cierre de la frontera, expulsiones de adultos solos y con familias, la reapertura y saturación de centros de detención de menores que viajan solos, y el mensaje presidencial de “no vengan”.
Respecto al despliegue en la zona del río Suchiate, que marca la frontera con Guatemala, testimonios de comerciantes guatemaltecos que cruzan a México para hacer compras, recogidos por el sitioSin Embargo, desmienten el discurso según el cual se trata de una medida contra la pandemia, pues denuncian que funcionarios y soldados lo único que hacen es pedirles documentación, sin tomarles la temperatura.
Por otra parte, las autoridades migratorias guatemaltecas han registrado un repunte en las deportaciones desde México. Según El Heraldo de Chiapas, hasta la primera quincena de marzo habían sido deportadas 2,300 personas de origen guatemalteco desde la Estación Migratoria Siglo XXI, superando la cifra de enero de 1,642.
Las detenciones de guatemaltecos se realizan por todo el territorio mexicano, los migrantes son concentrados en Tapachula y luego deportados a Guatemala.
Se tiene previsto que el operativo del INM y la Guardia Nacional en la frontera México-Guatemala se extienda hasta el 21 de abril.
Unidad a través de las fronteras
Ante la política antimigrante del gobierno mexicano y su subordinación a Washington, es necesaria la más amplia solidaridad de los explotados y oprimidos de Centro y Norteamérica con las familias migrantes, que huyen de la violencia y la miseria en busca de una mejor vida; exigiendo libre tránsito, residencia automática apenas pisen territorio de otros países, reparto de las horas de trabajo entre empleados y desempleados, con salarios dignos y plenos derechos para todos. |