Al día de hoy suman en México 2,391,367 casos activos, con 31,839 casos activos estimados y la alarmante cifra de 198,239 defunciones. Si bien el nivel de hospitalizaciones ha bajado, esto no quita que los enfermos (y los fallecidos) se atiendan en casas particulares; de allí la celebración del gobierno de reducir a solamente entre tres y seis entidades las que superan el 30% de ocupación camas de (con y sin ventilador).
En el primer rubro de camas generales, el gobierno cuenta 30,815 camas totales, con 6,277 camas ocupadas y solamente con la Ciudad de México, Puebla y Morelos —todas en semáforo naranja— por arriba del 30% de ocupación. En el segundo, sin embargo, sorprendieron con la noticia de que eran seis las entidades por arriba del 30% de ocupación de camas con respirador: la Ciudad de México, el Estado de México (también en semáforo naranja), Querétaro (naranja), Yucatán (naranja), Tabasco (naranja), y Michoacán en semáforo amarillo. En esta categoría el gobierno cuenta 10,587 camas totales, de las cuales 2,643 están ocupadas.
Con respecto a las dosis de vacunas, al cierre de las 16 horas de este lunes, el gobierno contaba haber aplicado 118,007 dosis, sumando un total de 734,463 vacunas. En total, la acumulación de vacunas es de 9,100,720, de las cuales se han aplicado 5,781,359 (es decir, con un avance del 64%).
En estas aplicaciones de dosis, son 851,833 las que han sido aplicadas como primera dosis al personal sanitario, con otras 597,120 como segundas dosis. En el rubro de las dosis aplicadas a adultos mayores, el gobierno contabilizó 4,177,600 aplicaciones de primera dosis y 119,914 segundas dosis, es decir, un avance del 3%.
En lo que respecta a los ESAVI (eventos supuestamente atribuidos a vacunación e inmunización), se han notificado 12,417, de los cuales 104 han sido catalogados como graves. Dichas cifras corresponden a 11,794 de Pfizer, 422 de AstraZeneca, 105 de SinoVac y 96 de Sputnik V.
Sin embargo, a las listas antes mencionadas de laboratorios que han surtido a México con dosis de vacunas, se suma la de CanSino, llamada "Convidencia" y envasada en Querétaro y que fue aprobada el día de hoy por la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (COFEPRIS). La vacuna es de una sola aplicación y puede conservarse a temperaturas de refrigeradores comunes, dotando al gobierno de 940,470 dosis.
El gobierno hizo convenio no sólo con otro laboratorio privado (CanSino Biologics, de procedencia china), sino que además fue el laboratorio Drugmex, en Querétaro, el encargado de envasarlo.
A pesar de estas medidas, la cantidad de vacunas compradas está muy por debajo de la población mexicana apta para la inmunización -unos 80 millones de personas mayores de 18 años-, una carencia que se hará notar cuando la fase de vacunación llegue a la población joven. El ritmo de la campaña de vacunación es mucho más lento que el necesario, mientras se avanza en la reapertura de actividades bajo la amenaza de la tercera ola de la pandemia, que ya golpea Europa.
Las trasnacionales farmacéuticas venden sus vacunas a los países con mayor capacidad de pago, pero no pueden cumplir los compromisos de producción y entrega. Mientras tanto, mantienen la sistemática negativa a liberar sus patentes para que cada país produzca según sus necesidades la dosis que necesite. Y se niegan a hacerlo porque les importan más sus ganancias que la vida de miles de millones de personas en todo el mundo. |