Participaron en la conferencia, José Ignacio Santos, secretario del Consejo de Salubridad General, órgano colegiado con funciones normativas, consultivas y ejecutivas en materia de salud, que depende directamente de la presidencia de la República. Así como Jorge Alcocer, presidente del mismo organismo y Secretario de Salud del gobierno federal. También participó Miguel Malo, asesor en enfermedades crónicas de la Organización Panamericana de la Salud.
Luego de la entrega de diplomas al personal destacado, Alcocer reconoció “la entrega física, mental y espiritual del personal de salud”. Este reconocimiento, sin embargo, en la realidad no ha sido tal como para terminar con las condiciones de precariedad laboral, bajos salarios y sobrecarga de trabajo que padecen el personal de salud y que se ha agravado durante la pandemia.
Los recursos destinados al sector siguen siendo escasos e insuficientes para la contratación del personal necesario con plenos derechos laborales. Tampoco alcanzaron para la dotación de suficientes insumos y equipo de protección personal, que evitaran el alto número de contagios entre las y los trabajadores de la salud durante la pandemia, lo que suscitó muchas protestas, que fueron ignoradas por el presidente.
Aún sigue pendiente completar la vacunación contra el covid de la totalidad del personal de salud a nivel nacional, tanto del sector público como privado, una medida elemental si se trata de “reconocer” su derecho a la salud y a la vida, además de sus derechos laborales.
Por su parte, Jenaro Villamil, presidente del Sistema Público de Radiodifusión del Estado Mexicano, denunció la práctica de los “montajes” o “noticias fabricadas” en sexenios anteriores. Entre ellos el caso de la ciudadana francesa Florence Cassez, acusada de secuestro junto a su pareja Israel Vallarta, durante el gobierno de Felipe Calderón.
Cuya supuesta detención, transmitida “en vivo y en directo” por Televisa y reportada por Carlos Loret, resultó ser un montaje para la televisión, cuya intención era ensalzar la labor de la Policía Federal y del secretario de seguridad pública, Genaro García Luna, hoy detenido en Estados Unidos por vínculos con el narcotráfico.
La secretaria de gobernación, Olga Sánchez Cordero, en aquel momento ministra de la Suprema Corte de Justicia, explicó el caso y la situación jurídica en que se encuentra actualmente Israel Vallarta, quien sigue detenido por otros secuestros.
También se mencionaron los casos de la desaparición y muerte de la niña Paulette, en el Estado de México, siendo gobernador de la entidad Enrique Peña Nieto. Y el caso del supuesto rescate de la niña Frida Sofía durante el sismo del 2017 que cimbró a la CDMX.
El presidente aseguró que en su gobierno jamás se llevarán a cabo este tipo de prácticas fraudulentas, que en su momento expresaron una “asociación delictuosa” entre el poder político y los medios de comunicación con el fin de manipular a la opinión pública.
También afirmó que en su gobierno “se garantizan las libertades, no hay censura, no hay represión”. Sin embargo, estas aseveraciones no se condicen con la realidad si tomamos en cuenta la situación por la que pasan las y los trabajadores de Notimex, la agencia de noticias del estado mexicano, que llevan ya más de un año en huelga en plena pandemia en defensa de sus puestos de trabajo y derechos laborales.
Estas trabajadoras y trabajadores han sufrido una fuerte campaña de difamaciones y calumnias por parte de la directora de la agencia, Sanjuana Martínez, en su condición de funcionaria del gobierno federal, además del hostigamiento de elementos de la Guardia Nacional. Campaña de satanización reproducida y amplificada por diarios afines a AMLO, como La Jornada, que ha recibido más de 400 millones de pesos en dos años por concepto de publicidad oficial.
Casi al finalizar, el presidente invitó a la población “a no tragarse todo lo que ofrecen los medios”. Ni oficialistas ni “opositores”, habría que añadir. Frente a eso, la Izquierda Diario es un proyecto que intenta darle voz a quienes no la tienen en dichos medios: las y los trabajadores, jóvenes, mujeres, comunidades indígenas y campesinas que luchan por sus derechos.
Mientras la conferencia mañanera se desarrollaba en el interior del Palacio Nacional, en el exterior docentes, trabajadores administrativos y estudiantes de la UNAM, junto a organizaciones solidarias y docentes de otras instituciones, se manifestaron por derechos laborales y en defensa de la educación. | 
