El viernes el Senado de la Nación convirtió en ley el proyecto que exime del impuesto a las ganancias a los trabajadores y las trabajadoras que cobren hasta 150 mil pesos, con 66 votos afirmativos y la abstención de Esteban Bullrich. En la misma sesión también se sancionó la reforma del régimen de monotributo, que consistió en la actualización de categorías que por ley debe realizarse todos los meses de enero y este año todavía no se había efectivizado.
El proyecto sobre el impuesto a las ganancias también abarca a los jubilados que perciban hasta ocho haberes mínimos. Aquellos trabajadores que cobren entre 150.000 y 173.000 tendrán deducciones para evitar grandes diferencias entre quienes están exentos y quienes deben pagar.
A partir de ahora la actualización del piso para estar exento de Ganancias se ajustará por el Ripte (promedio de variación salarial que elabora la de Secretaría de Seguridad Social). Una medida que traerá como consecuencia que muchos trabajadores que actualmente quedan eximidos, en los próximos meses con los aumentos salariales puedan volver a ser alcanzados por el impuesto.
La medida deja al descubierto la situación adversa que vive la clase trabajadora en el país. Mientras un millón seguirá pagando injustamente un impuesto a las “ganancias” y la exención alcanza momentáneamente a 1,2 millones, por otro lado la gran mayoría no son alcanzados por el impuesto debido a los bajos salarios que no alcanzan a cubrir la canasta básica. Según un informe de INDEC, durante el 2020 cerca del 60% de la población total ocupada percibió un salario promedio de $ 33.300 al término del cuarto cuatrimestre, muy por debajo de la canasta básica que calculaba el mismo organismo para ese momento de $ 54.207.
El diputados nacional por el Frente de Izquierda Unidad, Nicolás del Caño, planteó sobre el proyecto que “en pocos meses, sino se plantean otras medidas de actualización, el problema vuelve cuando impacten los aumentos de las paritarias y haya sectores inclusive que pueden conseguir mayores aumentos porque tienen mayor organización y mantienen conquistas”. Además sostuvo que se dio una situación similar con el debate de las jubilación, donde “nosotros habíamos planteado que la fórmula tenía que incorporar el Índice de Precios y optar por el que fuera más beneficioso para los jubilados”.
El referente de la izquierda también declaró que “el salario es lo que pagan los capitalistas los trabajadores para poder reproducir su fuerza de trabajo y las ganancias las que obtienen los capitalistas a partir del trabajo no remunerado, del trabajo no pago. Entonces son cosas completamente distintas. Los trabajadores no tienen ganancias, sino que los capitalistas la obtienen a partir de la explotación de los trabajadores, quedándose con este trabajo no remunerados”. |