Horacio Rodríguez Larreta tomó la presencialidad escolar como una disputa con el Gobierno nacional, cual campaña electoral. Sin embargo, no tomó las menores medidas para garantizarlo hasta el momento y donde los contagios fueron incrementándose en toda la Ciudad y en especial en las escuelas, incluso con muertes de docentes.
En esta nueva conferencia de prensa, a horas de que los chicos tengan que ir a la escuela, informa que habrá clases presenciales gracias a un fallo de la justicia porteña. Dicho sea de paso, una justicia que actuó con celeridad a favor de Larreta y cajonea cualquier otro amparo, incluso los que pedían la construcción de escuelas para resolver la falta de vacantes.
Sin embargo, este lunes los principales sindicatos docentes, UTE, ADEMyS y Sadop, van al paro exigiendo la suspensión de la presencialidad, repitiendo la medida que realizaran la semana pasada. En las escuelas no saben de números, pero si saben de aislamientos permanentes de burbujas por contagios cruzados, si saben de los docente y auxiliares que fallecieron por Covid-19. Como durante toda la virtualidad del año pasado y la poca presencialidad este año, nunca tomaron ni una de las medidas exigidas por los docentes y familias para poder garantizar la educación.
Por lo insostenible de su discurso, el Gobierno porteño avanzó con algunas medidas parciales. Se aceptó la educación virtual en la educación para adultos, los terciarios y los centros de formación profesional. Sin embargo, no anunció ninguna medida para poder garantizar la conectividad. Una demostración de que poco le importa la educación. Que para Larreta lo único que esta en juego es una disputa electoral.
Por otro lado, profundizarán el control en las puertas de las escuelas y modificarán los horarios de entrada y salida. Secundaria 7:30 y primaria 8:30 hs. Y se profundizará el control en el transporte público.
Al mismo tiempo advirtió, sin mencionar el mismo, que tienen un plan para mantener la presencialidad escolar en cada fase de los protocolos sanitarios.
Y volvió a cargar sobre la responsabilidad individual y llamó a reducir las reuniones sociales. Cargo sobre los docentes el cumplimiento de los protocolos y por tercero llamó a no usar el transporte público en horarios escolares.
Lo cierto es que en medio de esta guerra judicial y política por la presencialidad o virtualidad de la educación, se esconden intereses mezquinas. Ya que no se toman medidas de fondo para poder garantizarla seriamente en medio de una pandemia. Esta en manos de los docentes, en unión con las familias de las escuelas poder defender la educación y la salud de las y los chicos. |