Este lunes se dará una nueva reunión entre las cámaras empresarias que agrupan a los grandes bodegueros y Foeva, en el marco de las reuniones paritarias del sector. Esta reunión quedó acordada tras el rechazo de la federación de las y los trabajadores vitivinícolas a la última oferta salarial y luego de que el Ministerio de Trabajo extendiera la conciliación obligatoria que rige desde el histórico paro de fines de marzo pasado.
Miles de trabajadores y trabajadoras no solo siguen con expectativa las reuniones paritarias que se vienen sucediendo, sino que también exigen la continuidad de un plan de lucha en el caso de no llegar a un acuerdo que exprese el reclamo que vienen llevando adelante desde hace meses. A su vez, también denuncian que la información sobre la propuesta salarial hecha por las patronales es distinta en las actas de las reuniones con la federación y en declaraciones hechas por representantes de las cámaras empresarias en medios de comunicación.
En concreto, de las actas de las reuniones, difundidas entre los trabajadores a través de grupos de WhatsApp se desprende que la propuesta patronal, entre aumentos remunerativos y no remunerativos, alcanzaría el 84,5 % de aumento a principios de 2022, cuando se pagaría la última cuota. Sin embargo, Walter Pavón, gerente de Relaciones Institucionales de Bodegas de Argentina declaró en una nota publicada en el diario Los Andes publicada este sábado que la propuesta patronal es mucho menor: “ofrecimos un 42 % de aumento remunerativo, más un adicional por refrigerio del 10 %. El porcentaje se daría de forma escalonada, entre valores remunerativos y no remunerativos, arrancando desde marzo y hasta febrero de 2022”. El representante de los grandes bodegueros a su vez habló de una suma fija de $ 8000 por única vez en noviembre de este año.
Una diferencia significativa teniendo en cuenta que la discusión se da sobre la base de los salarios vitinvícolas, uno de los más bajos del país. Hoy en día un trabajador de bodega gana de básico $ 28.000, mientras que un trabajador de viña cobra $27000. Mientras tanto, las grandes bodegas aumentaron sus ganancias en millones de pesos, producto del aumento de las exportaciones del sector durante 2020.
Las grandes bodegas, que dilataron la discusiones salariales hasta después de la cosecha, hoy siguen dilatando el acuerdo salarial y dando información contradictoria para seguir jugando con el salario de miles de familias trabajadoras.
En la misma nota del diario Los Andes, Miguel Rubio, secretario de prensa de Foeva, aseguró que la oferta patronal se “acerca al 60 %”, lo que tampoco se coindice con la sumatoria de los distintos puntos del acta difundida. Rubio, a su vez, denunció que habían llegado a un acuerdo con las empresas de un aumento del 15 % remunerativo, más otro 15 % no remunerativo, junto con un bono de $ 10.000, pero cuando llegaron a la reunión paritaria, los empresarios bajaron esos montos al 13 % y el bono de $ 8.000 al que hizo referencia Pavón en la misma nota. Una burla a los miles de trabajadores y trabajadoras vitivinícolas que vienen luchando desde principios de año en defensa de su salario.
Ante la falta de información y maniobras de los empresarios, las y los trabajadores vitivinícolas autoconvocados exigen que el sindicato baje información precisa de los montos ofrecidos, y que sean los trabajadores en asambleas de delegados de base, por bodega y en plenarios, quienes discutan la propuesta y ratifiquen o no el acuerdo paritario.
Lee el acta difundida tras la última reunión paritaria: Reclamo trabajadores vitivinícolas: acta de la Audiencia de conciliación obligatoria by La Izquierda Diario on Scribd
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