Luego de que los ministros de finanzas de la Unión Europea ajustaran aún más la presión sobre Grecia planteando que retomarán el diálogo luego del referéndum de este domingo, el FMI se volvió a pronunciar. Esta vez, alertando que el país heleno necesitaría más ayuda financiera y hasta una quita para hacer frente a los vencimientos de la deuda.
“El Fondo Monetario Internacional advirtió el jueves de que Grecia necesitaría una extensión de los plazos para pagar los préstamos de la Unión Europea y una quita de deuda significativa si su economía crece a un ritmo más lento de lo esperado y no se implementan reformas”, señala un cable de noticias de Reuters.
Una señal de advertencia que trata, dentro de las enormes presiones mediáticas y de los lobbys, imponer el plan de reformas leoninas de la troika. Por otra parte, muestra los verdaderos intereses del FMI –y la troika en su conjunto- que es hacer pasar el ajuste y un nuevo ciclo de endeudamiento, una confirmación también del fracaso de los rescates anteriores que no hicieron más que agravar la situación de la deuda.
El reporte fue elaborado sobre la base de evaluaciones realizadas la semana pasada, antes del cierre de los bancos griegos y de que el país incumpliera con el pago de su deuda con el FMI.
"No podemos ir a nuestro directorio para completar esta revisión a menos que tengamos un programa amplio", dijo un alto funcionario del FMI en una teleconferencia, agregando cínicamente que el alivio de deuda por parte de los acreedores sería esencial.
El FMI dijo que Grecia necesitaría 36.000 millones de euros (39.890 millones de dólares) adicionales en financiamiento europeo de las necesidades totales de financiamiento adicional de 50.000 millones de dólares.
"Usando los umbrales acordados en noviembre de 2012, sería necesaria una quita que produzca una reducción de la deuda de más de un 30 por ciento del PIB para cumplir con las metas de deuda de noviembre de 2012", sostuvo la entidad.
Incluso en virtud de la proyección más optimista del FMI y con financiamiento hasta 2018, el fondo dijo que el diferencial entre la deuda y el Producto Interno Bruto de Grecia sería de un 150 por ciento en 2020 y de un 140 por ciento en 2022. Una confirmación que no hay ningún plan de alivio, sino una continuidad de las cadenas de sumisión al imperialismo por la vía del endeudamiento con o sin quita.
Más que nunca para enfrentar los chantajes de la troika y las maniobras impotentes de Tsipras y sus ministros de su partido Syriza, es necesario impulsar la más amplia movilización de los trabajadores, la juventud y el pueblo para imponer una salida obrera y popular ante la crisis. Los sindicatos europeos deben romper la tregua con los partidos y gobiernos imperialistas y, junto con las fuerzas de izquierda como Podemos, deben ser los principales convocantes a las acciones de masas para doblegar el plan de entrega y ajuste del imperialismo. | 
