En un contexto donde el municipio se encontraba fuertemente cuestionado por déficits millonarios y denuncias de “notable abandono de deberes”, fue derrotada la derecha, que durante casi dos décadas condujo la comuna, con Virginia Reginato (UDI) como edil.
Reginato, quien fuera alcaldesa de Viña del Mar durante los últimos 17 años, no pudo presentarse a la reelección, por haber excedido la cantidad de periodos en los cuales puede postularse una persona a dicho cargo público. La militante de Unión Demócrata Independiente fue incluso suspendida de sus funciones por posibles faltas graves y reiteradas a la probidad administrativa del municipio.
Entre 10 candidatos, las y los viñamarinos decidieron desplazar a la derecha y votaron con un 38% a la militante de Revolución Democrática Macarena Ripamonti. El pacto de la derecha, Chile Vamos, sacó solamente un 21,89%. |