Son los vecinos del barrio Nueva Unión que se sumaron a la protesta que realizaron esta mañana en el obelisco los trabajadores tercerizados de Edesur. Las voces de los que luchan por vivienda con los servicios básicos y trabajo se unieron en la capital. Una unidad necesaria para enfrentar esta crisis.

Los redoblantes furiosos acompañaron los cánticos contra los despidos y el atropello de los empresarios a los trabajadores y el pueblo pobre, en el corte realizado por trabajadores tercerizados de Edesur despedidos recientemente.

“Le quiero decir al gobierno que es injusto que despidan a los trabajadores mientras nosotros exigimos la luz” comentaba Esteban, un vecino del barrio Nueva Unión. “Necesitamos que nos den el suministro porque no tenemos para calefaccionar nuestras casillas en el invierno” comentó otro vecino del mismo barrio.

“Esta movilización es por el reclamo de nuestros puestos de trabajo, fuimos despedidos de forma arbitraria, nos despiden en medio de un nuevo tarifazo, pedimos a los usuarios que nos acompañen” dice un trabajador de la empresa ArgenCobra que presta servicios a Edesur.

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Una jornada que unió a vecinos y trabajadores contra un mismo enemigo. Las empresas como Edesur y Edenor ganaron 1,5 millones de dólares por dia en 2020, pero precarizan el trabajo y despiden. Al mismo tiempo le niega el suministro a las familias de los barrios recuperados como La Nueva Unión o Los Ceibos de La Matanza que albergan a cientos y cientos de familias pobres.

En el corte de los trabajadores también se hizo presente el diputado nacional por el FIT-U Nicolás del Caño quien llevó su solidaridad con los despedidos.

Las 70 familias que dejaron en la calle las tercerizadas como EMA o ArgenCobra tienen el derecho a luchar por su reincorporación. Saben que la unidad con otros trabajadores y vecinos de los barrios es un arma filosa para la pelea contra las empresas privatizadas y el gobierno de Fernández que sigue beneficiándolas con subsidios y tarifazos.

Las familias del barrio La Nueva Unión también tienen el derecho al suministro eléctrico. Más aún entrando a la época invernal y en medio de un nuevo pico de contagios con más de 35 mil casos de covid. Mientras la mitad de la población es pobre y 3 millones de personas no tienen vivienda, el plan del gobierno es seguir manteniendo y aumentando la riqueza de los que más tienen.

Esta unidad que se está empezando a forjar entre trabajadores y vecinos tiene que ser la llave para lograr una organización común que una a trabajadores ocupados y desocupados. Que al calor de dar la pelea por tierra, vivienda y trabajo pueda proponerse objetivos superiores. Solo esta unidad podrá imponer una salida verdadera para los trabajadores y el pueblo pobre