Alberto Fernández se reunió este mediodía de manera virtual con los mandatarios de 12 distritos. Según la información oficial, hubo acuerdo en endurecer las limitaciones a la movilidad por el salto de los contagios. Sin embargo, las fuerzas políticas patronales no discuten medidas de fondo -ni sanitarias ni económicas-, que permitan un combate mucho más poderoso ante la pandemia.
En el mediodía de este jueves el presidente Alberto Fernández encabezó reunión virtual con los jefes políticos de 11 provincias y de la Ciudad de Buenos Aires. El encuentro tiene el trasfondo de un nuevo salto en el caso de los contagios por covid-19.
Según la información oficial, en el mismo hubo consenso para la implementación de mayores restricciones a la circulación la actividad económica. Esta viene siendo la única “solución” que proponen las distintas fuerzas políticas patronales frente al crecimiento de los contagios.
El encuentro se desarrolló a lo largo de casi tres horas. Fue el segundo sostenido desde el Poder Ejecutivo con representantes de las provincias. En la tarde del miércoles había habido otra con 12 gobernadores más.
En el encuentro, según informa la agencia Télam, el Gobierno nacional insistió con la aplicación de mayores restricciones e instó a las autoridades provinciales a “redoblar los esfuerzos en el control" y a “exigir el cumplimiento y controlar” del DNU vigente en cada distrito.
La misma fuente indica que Horacio Rodríguez Larreta, jefe de Gobierno porteño, quien coincidió "en que hay que poner más restricciones" y "controlar más los espacios gastronómicos y de encuentros sociales y en espacios públicos".
A su turno, Axel Kicillof, gobernador de la provincia de Buenos Aires, defendió la actuación del oficialismo nacional y afirmó que las medidas que se tomaron anticipadamente desde Nación estarían “evitando una catástrofe sanitaria".
La afirmación se choca con la realidad de una saturación creciente de camas UTI en diversas provincias, así como con el salto creciente en los contagios, que este miércoles registraron el número más alto desde el inicio de la pandemia.
Sin embargo, este encuentro lo único que hacer es confirmar que la única "salida" que tienen las diversas fuerzas políticas patronales ante la pandemia es endurecer restricciones sin más.
Esta fue la denuncia que desplegó este miércoles en el Congreso Nacional el diputado del PTS-FIT Nicolás del Caño, cuando afirmó -ente otras cosas- que “no tocar los intereses de millonarios como Sigman tiene graves consecuencias”.
El legislador de la izquierda hace mención a la negativa oficial a declarar -o discutir la declaración- de utilidad pública del laboratorio mAbxience, que ya produjo el principio activo del equivalente a 60 millones de vacunas, ninguna de las cuáles quedó o llegó al país. De haberse dado ese escenario, se podría haber mejorado sustancialmente el plan de vacunación, hoy en crisis.
Esta es solo una de las medidas que propone el Frente de Izquierda y que macrismo y peronismo se niegan a discutir. Esta negativa tiene consecuencias reales sobre la salud y la vida de millones de familias.
