Eduardo no tenía ninguna patología previa. “La empresa lo obligó a volver a trabajar. Estaba muy muy triste por la muerte de su madre. El miedo de él era volver a los colectivos” cuenta Verónica, la esposa de Eduardo, y continúa: “Lo llamaron, le dijeron que si no volvía no le iban a pagar y mi marido tuvo que volver, estuvo dos meses sin cobrar. Llamaron a varios que estaban de licencia y los mandaron a trabajar igual. A él lo pusieron a limpiar colectivos por un tiempo, pero después le dijeron que tenía que volver a manejar y así fue cómo se contagió”.
“Lo único que yo pido es que todos los choferes estén vacunados, no puede ser que no los vacunen, son personas que están muy expuestas, como los médicos, los enfermeros, todos”, denuncia en televisión la esposa del chofer fallecido. Y continúa, “tienen el derecho de ser vacunados. A mi me paso ahora con mi marido, yo lo único que pido al presidente o a quien sea que por favor vacunen a los choferes, porque yo no quiero que haya otro Eduardo Vázquez. Él era joven, tenía una vida por delante”.
Los choferes de colectivos de distintas líneas del AMBA vienen protagonizando cortes en accesos a la capital exigiendo, entre otras cosas, que el gobierno los incluya en el plan de vacunación ya que son trabajadores esenciales que están constantemente expuestos al contagio y no quieren tener que soportar más muerte como la de Eduardo. Este viernes concentraron en el Obelisco..
El reclamo de vacunas para los esenciales se hace oír en diferentes sectores. Por nombrar solo un ejemplo, los portuarios y marítimos vienen de realizar un paro de 48hs en reclamo de vacunación para todos, luego de enterarse de la muerte del cuarto compañero. La unidad de todas estas luchas (ferroviarios, aeronáuticos, portuarios, comercio, salud) es lo que puede conseguir la fuerza necesaria para imponer un calendario de vacunación masiva para todos los trabajadores, lo que solo puede lograrse afectando las ganancias y los intereses de los grandes laboratorios privados.
La muerte de Eduardo era evitable, en primer lugar, porque al no respetarse la licencia que le correspondía fue expuesto al contagio cuando no debió haberlo estado. Es necesario recordar que el Gobierno nacional, en un claro guiño a las empresas, levantó el decreto que prohibía presentarse en sus puestos a trabajadores con factores de riesgo. Los trabajadores del transporte de colectivos de un sector estratégico, son esenciales, pero los empresarios y el gobierno los tratan como descartables.
Según el propio Ministerio de Transporte , son más 132.117 choferes de colectivos y ómnibus que se exponen diariamente al contagio. Es necesario que se garanticen las vacunas para todos, el estado y los empresarios tienen que hacerse responsables. A su vez medidas sanitarias necesarias con protocolos que deben discutir los propios trabajadores impulsando, por ejemplo, Comisiones de Seguridad e Higiene como lo han hecho en otros lugares de trabajo, las cuales son ejemplos de que si se organizan pueden imponerles a las patronales que se cumplan sus exigencias.
Nuestro país tiene capacidad de producir vacunas y ya podría haber vacunado a una gran parte de su población, aunque los medios masivos de comunicación no hablen de ello y el gobierno mire para otro lado. Ante las cifras récord de contagios y muertes por covid, se hacen cada vez más urgentes medidas de emergencia para enfrentar la pandemia y evitar que haya aún más muertes.
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