Si alguien tenía dudas sobre cómo será el nuevo gobierno de Pere Aragonès y Jordi Sánchez, el primer día ya tiene una muestra. Hoy las BRIMO de los Mossos d’Esquadra han sido convocadas por el juez para iniciar repentinamente otro intento para desalojar tres vecinos del edificio llamado “Bloc Llavors”. El nuevo Govern ha estado desaparecido toda la mañana.
Un centenar de activistas y vecinos han estado resistiendo los embates de los Mossos d’Esquadra. Varios dirigentes de la CUP se han puesto al frente, entre ellos Dolors Sabater, Carles Riera, Eulàlia Reguant i Xavier Pellicer. La represión de la BRIMO ha sido bastante violenta, pero los Mossos han acabado otra vez pintados con colores “rave”.
Varias personas del Sindicato de Inquilinos han ocupado la sede del principal partido de gobierno, Esquerra Republicana. El Sindicato denuncia la actuación del Govern ante el desahucio como responsable de los Mossos d’Esquadra. Todas las personas que habían estado resistiendo la acción represiva se han dirigido posteriormente en la misma sede de ERC de la calle Calàbria.
El primer día de Gobierno, Aragonés no cumple con las mínimas exigencias que la diputada de la CUP-Guanyem, Dolors Sabater, pidió el día de la investidura: que Aragonés no use a las BRIMO en ningún desahucio. Obviamente, no es casual que un juez haya ordenado el desahucio en estos días, pero el Govern también se puede resistir, puesto que la policía depende de ellos y también podría haber enviado a sus dirigentes, como ha hecho la CUP, para evitar el desahucio.
Pero esto es imposible. El nuevo Govern es una alianza entre ERC y JxCat que tuvieron problemas para limitar un poco el precio de alquiler. Entre los nuevos consejeros, hay un alto directivo de La Caixa, como consejero de Economía. Un gobierno así es un gobierno “neo-liberal” y gobernará para las grandes empresas, mientras los más pobres sufrimos la Covid y las consecuencias económicas de la gestión capitalista de la pandemia.
Ante el incumplimiento de la exigencia que ha hecho la diputada Dolors Sabater, la CUP- Guanyem tiene que romper inmediatamente su apoyo al nuevo Govern. Ya se ve que no es importante para el presidente Pere Aragonès acabar con el desahucio de las familias más pobres, y mucho menos todavía, evitar la violenta represión de las BRIMO. | 
