Con 19 votos a favor y 9 en contra, el consejo regional de Valparaíso aprobó un nuevo convenio con carabineros, esto ad portas a que asuma el recientemente electo gobernador regional Rodrigo Mundaca. Dicho convenio contempla la construcción de infraestructura, compra de nuevos vehículos y equipo para el cuerpo de la policía entre los próximos años 2022 y 2024. Esto involucraría más de 24 mil millones de pesos, dándoles un financiamiento de más de 53.341.572.000 pesos.
Todo esto a pesar de que Rodrigo Mundaca, quien fue electo con más del 43% de los votos en el reciente proceso de elecciones haya solicitado previamente que no se “comprometieran” recursos hasta su llegada a la gobernación ya que dijo: “los dineros van a estar priorizados para la preservación de los sistemas comunitarios de agua potable rural, para la preservación de la agricultura familiar campesina, para la recuperación ecosistémica de los cuerpos de agua que hoy se encuentran sobre otorgados”.
Sin embargo, sabemos que el problema de fondo aquí es otro, ya que mientras nos encontramos en medio de una crisis sanitaria con un sistema de salud público colapsado, con falta de recursos y agobio para los trabajadores, sigue la insistencia del gobierno por fortalecer su órgano represivo mediante la inyección de cifras millonarias.
Ante esto es que Antonio Páez, trabajador de Starbucks y ex candidato constituyente denuncia el que se estén ocupando los fondos regionales para financiar el lujo y bienestar de los represores, esos mismos que durante la rebelión mientras miles gritábamos en las calles fuerte y claro ¡Fuera Piñera! mutilaron, torturaron, violaron y mataron a cientos de trabajadores, pobladores, mujeres y estudiantes por salir a exigir una vida digna. Represores que a su vez, son el organismo que protege al gobierno, el mismo que mientras se está llevando a cabo un proceso de convención constituyente tienen a presos políticos mapuche y de la revuelta de Octubre del 2019. Es por todo esto y más que decimos ¡Ni un peso más para los pacos!.
Sabemos que no podemos confiar en este tipo de instituciones, ya que mientras que las y los trabajadores de la salud enfrentan agobiantes jornadas laborales y la precarización de un sistema de salud saqueado durante más de 30 años por grandes empresarios, se sigue financiando a quienes son profundamente cuestionados por las grandes mayorías, quienes su único objetivo es proteger los intereses de este gobierno empresarial. Desde Vencer, Pan y Rosas y el PTR hacemos un llamado a seguir organizándonos, y que sigamos luchando para que las y los trabajadores, en conjunto con pobladores, mujeres y estudiantes quienes administremos nuestros propios recursos y nuestras vidas. |
