Ante las declaraciones del intendente de la ciudad de Neuquén, Mariano Gaido, en las que pidió que la justicia actúe contra las familias que viven en la toma, la Izquierda Diario dialogó con vecinas de Casimiro Gómez que le respondieron explicando la realidad que se vive en el asentamiento.
El intendente de la capital neuquina Mariano Gaido hizo declaraciones a un medio televisivo local, donde expuso que “de ninguna manera vamos a avalar las tomas de tierras de manera ilegal”. Afirmó que quienes llevan adelante la toma de tierras fueron denunciados ante la justicia por el propio gobierno del MPN e instó a que las familias “tienen que dejar esos lugares, para que se desarrolle la planificación de la ciudad”.
Desde hace más de un año hay más de 300 familias viviendo en el asentamiento ubicado sobre la Av. Casimiro Gómez en el oeste neuquino. Sin acceso al agua, la luz ni el gas hay cientos de trabajadores con sus hijos que exigen el derecho más elemental: acceder a una vivienda digna con servicios básicos. Los comentarios del intendente son un claro ataque a las y los vecinos del asentamiento en Casimiro Gómez, dado que el intendente no hizo referencias ni hay respuestas sobre las tomas de tierras “VIP” del Rincon Club de Campo, que erigió su cerco incorporando para su uso privado una calle pública, e impidiendo el uso recreativo por parte de toda la población de la costa del río Neuquén.
Ante la consulta de La Izquierda Diario, las vecinas de Casimiro Gómez respondieron a estas declaraciones.
LID: El intendente Mariano Gaido dice que las familias de Casimiro Gómez están cometiendo un delito y que podrían recurrir al instituto municipal de urbanismo y hábitat para encontrar una solución ¿es cierto esto?
“Lo que le diría a Gaido es que no utilice la justicia en contra del vecino trabajador como las familias del asentamiento Casimiro. Acá ocupamos una tierra por falta de oportunidades, él nos habla del Instituto municipal de habitat y urbanismo, pero realmente se le da el privilegio a unos pocos. Lo único que hacen es darnos vuelta la cara, que utilice la justicia para no vulnerar más los derechos de los niños, de los abuelos, de los enfermos. Para eso que utilicen la justicia, no en contra de las familias que lo único que reclamamos es el derecho a la tierra.” Nos responde una de las vecinas que organiza el comedor “Familias Unidas Casimiro Gómez” donde se alimentan muchos niños y niñas que viven allí.
“Somos en su mayoría vecinos que alquilamos hace más de una década y en medio de la pandemia tocó elegir comer o pagar el techo, pero no es solamente la vivienda, sino la educación y la salud de nuestros niños... estamos en total abandono y ese es el primer delito” nos decía Marina, una joven trabajadora que vive de la venta de comida.
LID: Las familias que viven actualmente en la toma de Casimiro Gómez ¿tienen alternativas de dónde vivir?
“La única alternativa que nos deja este gobierno es la calle. El changarin que en época de pandemia no pudo seguir pagando un alquiler por arriba de los 20 mil pesos, no tiene otra alternativa, eso es lo que incita este gobierno, que la gente viva bajo un puente, porque sabemos que si nos vamos de acá, perdemos lo único que tenemos, que es un pedazo de tierra, si nos vamos de acá nos vamos todos a la calle.”
LID: ¿Cómo piensan continuar la pelea por la tierra y la vivienda que vienen llevando adelante?
“Somos familias trabajadoras que realmente peleamos el derecho a una vivienda. La única forma de que nos levantemos de acá es con una propuesta en mano, donde nos digan concretamente a donde nos van a trasladar, sino seguirán las medidas de fuerza. Queremos ser escuchados y que dejen de mentir y calificarnos de delincuentes, peleamos un derecho elemental como es la vivienda. Por eso mismo si no llegamos a un acuerdo las medidas serán más duras hasta que nos den realmente una solución.”
Desde este medio venimos reflejando la realidad de las familias a las que el MPN ataca por exigir lo que les corresponde. Mientras las petroleras extraen nuestros recursos, generando ganancias millonarias y contaminando nuestros suelos, para las y los trabajadores el gobierno no ofrece más que hambre y miseria. Por eso es fundamental el apoyo e todas las organizaciones políticas y sociales a la lucha por la tierra y la vivienda.
En el asentamiento viven muchos niños y niñas cuya alimentación muchas veces depende de los merenderos y comedores que organizan los propios vecinos. El merendero “Los Peques” y el comedor “Familias Unidas” necesitan de donaciones para garantizar un plato de comida caliente en pleno invierno. La RED de Trabajadores Precarizados se encuentra organizado una campaña solidaria para colaborar con donaciones en apoyo a las familias que vienen luchando por el acceso a la vivienda y los servicios a la que te invitamos a sumarte.