A la par de los anuncios de renovación de las flotas de trenes del ferrocarril Sarmiento y del Mitre, a lo que se suma la compra de material rodante para la Línea B del subte, los indicadores reportan el efecto de la recesión sobre el uso de los medios de transporte.
Según un informe del INDEC, la cantidad de pasajeros en los diferentes medios de transporte descendió, en algunos casos abruptamente. Parte de esta merma podría deberse al aumento en los precios. En el caso del subte, desde que el macrismo se hizo cargo de la administración el precio del boleto aumentó un 309%, lo que hizo que muchos optaran en principio por otros medios de transporte, impactando esto en la cantidad de boletos vendidos. Pero esta merma no se ve reflejada necesariamente en un aumento en las demás alternativas para viajar. Mientras que el subte perdió 12,4% pasajeros en el último año, los colectivos transportaron un 6% menos de personas, siendo el porcentaje de un 3% en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.
En el análisis por línea subterránea se observa que el mayor descenso se registró en la línea C con un 21,7% y en la línea B con un 19,5%. En el caso de esta última incluso se debería ver el impacto de la inauguración de la estación Juan Manuel de Rosas la cual fue inaugurada el 26 de julio del 2013.
En el caso del transporte de ómnibus, si bien la caída de venta de boletos de los colectivos que realizan todo su recorrido dentro de la Ciudad Autónoma es de 3%, los que solo tienen cabecera en dicha ciudad pero también hacen parte de su recorrido en la Provincia de Buenos Aires presentan una caída del 4,5%. Como parte del análisis hay que tener en cuenta que el servicio de ómnibus transporta el 75% de los pasajeros en la zona metropolitana (AMBA) mientras que el subte tiene una participación del 12%.
De esta manera, es evidente que la recesión está golpeando en el nivel de actividad, y por tanto de trabajo de las personas; hay que tener en cuenta la influencia que pueden tener también las suspensiones que ya se presentan por miles en algunos sectores de la economía como el automotriz, además de los despidos, aunque estos no sean masivos por el momento. Mientras, la inflación crece a pesar de los programas gubernamentales como el “Precios cuidados” y el changuito queda cada vez más liviano. | 
