Julieta Ana
| Corresponsal Mendoza/ Estudiante de Geografía UnCuyo
Los y las guardaparques de la provincia se manifestaron en los portones del Parque General San Martín, reclamaron por mejoras salariales, pase a planta de contratados y el personal necesario para abarcar la conservación de todas las áreas naturales protegidas
Desde 2015 viene avanzando un sistemático vaciamiento del Sistema de Áreas protegidas de la provincia de Mendoza traducido en recorte salarial, de servicios en las distintas zonas, y también recorte de personal. Desde ese año se perdió el puesto de trabajo de 30 guardaparques por malas condiciones laborales, precarización y contratos basura. Actualmente son 90 guardaparques a cargo de 15 áreas naturales protegidas que comprenden el 13% de la superficie del territorio mendocino.
La falta de personal tiene diversos impactos: sobrecarga a quienes quedan trabajando en terreno, implica el cierre de reservas o seccionales, como en el Parque Aconcagua o Caverna de las Brujas, y deja desprotegidas las reservas ante cazadores de fauna nativa o la contaminación de turistas.
Desde La Izquierda Diario dialogamos con las y los trabajadores que actualmente se encuentran en estado de asamblea y sin prestación de servicios en las reservas pero sí activos en su mantenimiento. Reclaman además por la falta de insumos básicos como el gas o alimentos para guardaparques, imprescindibles para poder realizar su labor no sólo durante el invierno.
Durante la tarde del día de hoy se cerró la Reserva Ñancuñan ante la falta de alimentos y de combustible para que las y los guardaparques puedan acceder a ella. Es la primer reserva de la provincia que esta semana cumpliría 60 años. Mientras desde la Secretaría de Ambiente festejan el aniversario por redes sociales, en los hechos no destinan el presupuesto necesario para su mantenimiento ni garantizan las condiciones laborales necesarias de los y las guardaparques que son quienes garantizan que las Áreas estén efectivamente protegidas. El pasado lunes 5 de julio se cerró la seccional Punta de Vacas debido a que hace 6 meses no destinan el presupuesto necesario para mantención de gas, esencial en esa zona.
Esta movilización se da en un contexto provincial donde los distintos reclamos de trabajadores estatales vienen de conjunto. Este viernes 9 de julio los sindicatos AMPROS, SITEA, Judiciales, SUTE y otras organizaciones sociales, socioambientales y estudiantiles, se convocan a las 10hs en el km0 en la unión de sus reclamos: ningún aumento por debajo de la inflación, ningún trabajador bajo la línea de pobreza. Más presupuesto para salud, educación y para las y los trabajadores judiciales.
El gobierno de Suárez que se jacta de impulsar una “ciudad sustentable” o de preocuparse por el medioambiente, en los hechos desfinancia las áreas naturales protegidas. Un caso más que demuestra que el modelo de desarrollo es el extractivismo a costa de nuestros bienes comunes. En diciembre de 2019 le dijimos no a la megaminería y seguiremos defendiendo nuestros bienes comunes y a quienes, como las y los guardaparques, que los protegen.