Durante la mañana de hoy con un enorme operativo policial desalojaron 300 familias del Barrio La Ribera. La gendarmería reprimió a los vecinos, detuvo a personas y demolió con topadoras las construcciones de material. Las familias están exigiendo "no al desalojo".
Cientos de vecinos que fueron desalojados esta mañana, marcharon por la tarde hacia el Puente La Noria, uno de los principales accesos a la CABA, donde los recibió un fuerte operativo policial. Reclamaron por la liberación de personas detenidas (que estarían liberando esta noche), exigen que se les restituyan las tierras, y que se acerque el gobierno a dar una solución al problema habitacional. Uno de los vecinos cuenta que “a las siete de la mañana vino gendarmería y rompieron todas las casas. Había niños y mujeres embarazadas, mujeres mayores, no les importó y pasaron encima de todos ellos.”
Las familias denunciaron que venían siendo hostigadas desde hacía semanas. Uno de los vecinos da su testimonio para la Izquierda Diario y denuncia que “El domingo vino un montón de gendarmería. Entraron a cada lote y nos sacaron los pagarés [los recibos] de lo que pagamos cada mes; algunos le llevaron los originales y a otros copias. Entonces esta mañana no teníamos cómo defendernos. (...)Tampoco nos presentaron ninguna orden de desalojo”
Un vecino de la Ribera denunció que “desde el municipio vinieron a hacer la promesa de que iban a hacer calles asfaltadas, una plaza, una salita, es decir, estaban en conocimiento de barrio. No cumplieron sus promesas, y nos reprimieron.”
Se sumó a la movilización a Puente La Noria una delegación de vecinos de la Asamblea Permanente de Guernica que llevó la solidaridad y el apoyo de quienes siguen peleando desde el año pasado y continúan organizados por tierra, vivienda y trabajo.
Fabián se dirigió a los vecinos y grita: “Yo soy vecino de Guernica y fui reprimido. Vengo a apoyarlos porque la lucha de ellos es la de nosotros(...) Reprimen a los laburantes, pero nosotros movemos el mundo, ya se va a dar vuelta la cosa. El gobierno está desalojando en toda la Argentina, paga la deuda y a nosotros nos dejan en la calle. Estamos para apoyarlos en todo lo que necesitan y a juntarse con todos los sectores en lucha”.
Como pasó en Guernica y se repitió en los desalojos siguientes, el gobierno y los grandes medios que lo respaldan insistieron durante todo el día que esta situación excede a las decisiones políticas y que se trataba de una resolución judicial. Esto sucedía mientras la gendarmería comandada por la ministra Sabina Frederic demolía el barrio.
A la vez, durante el día de hoy se hizo público que quien reclamaba esos terrenos eran los dueños del Mercado Central que hace instantes salió a desmarcarse del conflicto.
En el último tiempo las tomas de tierras se multiplicaron en todo el país ya que miles se encuentran bajo la línea de pobreza, sin trabajo o con uno que no les alcanza para vivir y pagar el alquiler. Recientemente, en Lomas de Zamora desalojaron un predio en el barrio Santa Catalina y hasta hoy aún hay personas detenidas.
En el distrito gobernado por Martín Insaurralde, en sintonía con el gobierno nacional y provincial, la respuesta a las familias agobiadas por la falta de vivienda y la crisis habitacional es la represión. De la misma manera actuó con los trabajadores de la feria de Olimpo que son 4 mil familias que vienen exigiendo poder volver a su lugar para poder tener un sustento.
Hace sólo una semana Axel Kicillof, Cristina Fernandez y Martín Insaurralde hicieron un acto en el que hablaron sobre la juventud de los barrios populares.El peronismo le ofrece a la juventud discursos reciclados, mientras en los hechos esos jóvenes trabajan de manera precaria, padecen la crisis habitacional porque viven con familias numerosas en lugares reducidos, tienen que elegir entre comer o pagar el alquiler, etc. Ante la realidad, se caen los relatos.
Al cierre de esta nota, los vecinos lograron liberar a los detenidos y terminaron la jornada con la promesa de una instancia de diálogo con la justicia.