Este miércoles falleció a los 85 años Nicola Corradi, el cura italiano condenado a 42 años de prisión por los delitos de abuso sexual perpetrados en el instituto Antonio Próvolo en Mendoza.
La noticia fue confirmada este miércoles, aunque aún se desconocen la causa de muerte.
Corradi murió siendo cura de la Iglesia Católica y sin juicio canónico. Solo fue condenado por las aberraciones que cometió en Mendoza. La denuncia de encubrimiento del Vaticano llegó a la ONU que exige explicaciones sobre los abusos sexuales eclesiásticos.
Este sacerdote italiano dejó su país natal en 1980, cuando ya las sospechosas de vejámenes se posaban sobre él en Verona, mientras estuvo a cargo del Próvolo de esa ciudad y en donde habría cometido sus primeros ataques sexuales contra los alumnos. En esos años es trasladado a la ciudad de La Plata designado como máxima autoridad de la institución de niños hipoacúsicos con el mismo nombre hasta 1997. Un año después estaba radicado en Mendoza donde también estaba al frente del instituto ubicado en Luján hasta 2016 cuando comienza el proceso judicial debido a las denuncias de abuso contra él y otro sacerdote, Horacio Corbacho, quienes junto con el jardinero del instituto, Armando Gómez fueron condenados el 25 de noviembre de 2019 a 42, 45 y 18 años de prisión respectivamente.
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