Este es uno de los motivos principales que explican los elevados márgenes del sector para el especialista en estudios agrarios y Doctor en Economía, Diego Fernández. "En 10 mil hectáreas el excedente es de $ 750 millones"
El especialista en estudios agrarios y Doctor en Economía, Diego Fernández, explicó a La Izquierda Diario los motivos por los cuales este año los márgenes brutos por hectárea son muy elevados. Altos precios internacionales, un tipo de cambio combinado con niveles inferiores de retenciones a las exportaciones y salarios abaratados son algunas de las claves de las ganancias extraordinarias del agropower.
Sobre los márgenes brutos Diego Fernández precisó que en términos promedio una hectárea de soja puede arrojar un excedente de entre $ 65.000 a $ 75.000. "Para un pool (de siembra) que tiene 10 mil hectáreas, genera un excedente de $ 750 millones al año".
Este dato es posterior al pago de las retenciones a las exportaciones. "Incluso en la zona núcleo el margen puede ser el doble", aclara Fernández, y especifica que "La mayor parte de ello es renta de la tierra".
Las claves de las ganancias extraordinarias del agropower
"Lo primero que diría es que fue un valor de la producción excelente, porque por un lado fue una buena cosecha en volumen, bien por encima de las 100 millones de toneladas que ahora es habitual pero era una fantasía hace pocos años, y por otro lado es que se vendió a precios muy buenos", señaló.
En relación a los precios, Fernández indicó que "históricamente hubo esa queja en contra de que en el momento de las cosechas sudamericanas los precios de los granos eran inferiores". Sin embargo a nivel internacional se dio un resultado distinto este año con "ajustadas relaciones stock-consumo norteamericano y mundiales en general que hicieron que haya una amplia ventana en la cual se podia vender por arriba de 500 dólares". Pero en particular en el momento pico de abril-mayo que es "cuando se cosecha y se vende la mayor parte, la soja argentina estaba bordeando los 600 dólares, la marca mítica que no se ha superado históricamente".
Pero también en el maíz también fueron elevados precios. "Obviamente son cultivos muy relacionados, pero el maíz lo que tiene es que hay muy bajas retenciones en términos históricos, están en el 12% que es realmente bastante poco, entonces así la ecuación funciona muy bien".
"Al elevadísimo precio del mercado mundial se le suma el valor del dólar", continúa explicando Fernández. "El dólar a $ 100 pesos es un dólar elevado, caro. La combinación entre ambas cosas hace que los márgenes para la actividad primaria hayan sido muy buenos en esta campaña".
Pero además de un tipo de cambio favorable que garantiza el gobierno, también " hay que ver el tema del factor trabajo, que se paga en pesos argentinos" explica Diego. "Son salarios que están en muchas cosas, no sólo en los labores agropecuarios de cosecha, sino también en el transporte, el acondicionamiento de granos, la estiva, pese a sus heroicas luchas en el sector aceitero, son salarios que han corrido por debajo del valor del dólar y los granos."
Por último, Diego desarmó algunas falacias sobre los costos de los insumos. "Es cierto que los insumos importados suben pari passu con el dólar. Pero ese insumo importado llega acá y tiene que transportarse y venderse al mayorista, al minorista, y todos esos son costos en pesos. Aunque sean importados no han corrido al paso del dólar por el componente nacional que tiene el producto importado" afirma el especialista.
Márgenes brutos históricos y concentración del capital
Diego Fernández es Doctor en Economía e investigador del Centro Interdisciplinario de Estudios Agrarios (CIEA-UBA) de la Universidad de Buenos Aires. Entre sus estudios se destaca el análisis de la rentabilidad agropecuaria de los cultivos de exportación de la región pampeana y los procesos de concentración económica en el sector.
"Considerando costos promedio a precios de mercado, el margen promedio tomando cultivo de soja y un rendimiento de 3 toneladas por hectárea, quedan 65 mil pesos por hectárea. Para los grandes empresarios que tienen economía de escala en compra de insumos o contratación de cosecha, pueden ser un margen de 75 mil pesos por hectárea", explicó Diego.
Esto que es calculado para una sola hectárea implica que para quienes poseen cientos de ellas se están quedando con resultados millonarios. "Es decir que una explotación de mil hectáreas está generando un margen de 75 millones de pesos y un pool que reúna 10 mil hectáreas está generando excedentes por 750 millones de pesos al año. Esto en promedio, si se toma la zona núcleo debe andar por el doble porque no hay rindes de 3 toneladas por hectárea sino 4,5 o más".
"La mayor parte de ello es renta de la tierra, una parte de la renta van a impuestos que ya los hemos excluido (en el cálculo)", agregó.
Por último, el investigador de la UBA precisó que "los que tienen más espalda son los que hacen esos negocios. No sólo en las crisis se concentra el capital agrario, en los períodos de bonanza también. En los últimos censos agrarios la cantidad de explotaciones se redujo a la mitad. Hay un proceso de concentración que genera mucha superficie cultivada en cada vez menos manos".
Ganadores y perdedores no naturales en la pandemia
La radiografía de la rentabilidad del sector agroexportador refuerza una conclusión: en las crisis, y en esta pandemia, hay ganadores y hay perdedores que no son un “resultado natural” de la pandemia sino que hay decisiones políticas.
En el caso del agro está a la vista, y lo reconoció Zaiat y la propia Cristina Fernández: el gobierno está con sus políticas favoreciendo que los grandes grupos económicos y propietarios de la tierra se apropien de toda esa masa extraordinaria de ganancias.
¿Qué saca el Gobierno a cambio? La liquidación de divisas por exportaciones agrarias marcó un récord de U$S 15.000 millones acumulado hasta el mes de mayo. El Banco Central ya compró U$S 7.200 millones para engrosar las reservas.
¿Para qué acumula dólares? Para negociar con el FMI y pagar la deuda.
El Gobierno y las patronales agrarias vuelven a ser socias del agronegocio. Un negocio que favorece a toda la clase empresaria.