El Senado finalmente logró obtener un dictamen de mayoría de la Comisión de Legislación del Trabajo, que preside el peronista Daniel Lovera de La Pampa, para extender los días de licencia por maternidad y paternidad, fallecimiento de familiares o cónyuges, ampliar permisos para casos de nacimientos de niños prematuros y de adopción. Además se sumarían licencias referidas al cuidado de un hijo o una hija en caso de enfermedad, aquí se autorizarían 3 días por mes con un máximo de 15 en el año.
Este tema no es nuevo, hace años que la ampliación de licencias forma parte no solo de la agenda del movimiento de mujeres sino de las trabajadoras y trabajadores en general, pero siempre fue cajoneada a instancias de los intereses de las patronales y entidades como la UIA.
Esta vez el dictamen se logró a partir de un compendio de 26 proyectos de diferentes fuerzas políticas, sin embargo como en años anteriores empresarios y la UIA ya encendieron sus alarmas para una vez más tratar de impedir que se transforme en ley.
Daniel Funes de Rioja, quien dirige la UIA, envió una carta a los legisladores de la comisión manifestando la preocupación de los industriales por el aumento en los costos que estas modificaciones a la ley podrían ocasionarles.
Cuando hablan de costos significa sin más que no quieren hacerse cargo del pago de días no trabajados por las circunstancias mencionadas más arriba. Recordemos que las licencias vigentes, por maternidad o paternidad, por ejemplo, están a cargo del Estado a través de la Anses.
Uno de los cambios que genera mayor rispidez es la obligación para las empresas y las pymes de más de 50 trabajadores de contar con guardería para el cuidado de los niños o a pagar un monto al empleado por este concepto.
Uno de los ámbitos donde la desigualdad se hace notoria es sin dudas en el trabajo. Y no solo porque en promedio las mujeres cobran el 27% menos que los varones por igual tarea, sino porque derechos básicos que van desde el derecho a la lactancia, las ausencias justificadas por familiar enfermo, jardines parentales hasta la licencia por maternidad no se encuentran vigentes o están restringidos.
La obligación de que existan lugares de cuidado en los trabajos es un tema medular y un reclamo que no fue escuchado por ninguno de los últimos gobiernos. La disponibilidad de estos lugares para las mujeres que trabajan es clave ya que se transforma en la posibilidad o no de trabajar fuera de la casa, sobre todo para aquellas que no tienen la posibilidad de acceder a instituciones de gestión privada.
La pandemia visibilizó la importancia del tiempo en las tareas de cuidado, tiempo que destinan en su mayoría las mujeres. En una encuesta de alcance nacional se observó que el 66% de las personas encuestadas con hijos tuvieron que reducir su jornada laboral, pero en el caso de las mujeres el porcentaje asciende al 90%,es decir 9 de cada 10 mujeres con hijos debieron resignar sus proyectos y horas laborales (pagas y fuera de sus hogares) para asumir mayores responsabilidades domésticas, de cuidado, y por la escolaridad se sus hijas e hijos.
Por este tema la carta enviada por la UIA “sugiere” que sea el Estado el que cubra esta necesidad dejando a las Pymes afuera de esta obligación. En cuanto al pago sustitutivo “proponen” que no resulte excesivamente oneroso para las industrias.
La modificación planteada para el artículo 184 de la Ley de Contrato de Trabajo tiene como objetivo que la mujer, tras haber tenido un hijo, pueda elegir no sólo entre la reincorporación a jornada completa y el período de excedencia, sino también una vuelta al trabajo con una jornada reducida escalonada de 4, 5 y 6 horas diarias, en tres meses, o una jornada reducida al 50%, con equivalente reducción del salario percibido por el plazo máximo de seis meses y sin descansos diarios por lactancia.
Ellos ganan y las mujeres pierden
Durante el año 2020 la crisis económica agudizada por la pandemia arrojó ganadores y perdedores. Las mujeres jóvenes (14 a 29 años) fueron las más afectadas ya que la desocupación llegó al 28,5%.
Curiosamente las ramas industriales que emplean mayor número de mujeres tuvieron ganancias de millones de dólares.
Así por ejemplo Mondelēz International registró a nivel global una ganancia neta de 3.555 millones de dólares en 2020. El gigante de bebidas y alimentación PepsiCo obtuvo un beneficio neto a nivel global en 2020 de 7.120 millones de dólares, según publicó en su página. Nestlé, otra de las grandes empresas del rubro, registró beneficios netos en el mundo por 12.232 millones de francos suizos (unos 13.642 millones de dólares).
La posibilidad de avanzar en licencias pagas y la obligación de proporcionar lugares de cuidado para las mujeres que trabajan es un paso que podría disminuir las desigualdades que enfrentan a diario la mayoría de las mujeres. Sin embargo este proyecto quedará trunco si no se tocan los intereses de los empresarios.
Por el momento todos los anuncios y programas que ha lanzado el gobierno tienen su eje en el asistencialismo y no en hacer modificaciones estructurales, el final de la historia por ahora es incierto y habrá que esperar a que el proyecto llegue a Senadores. |