Los trabajadores del hospital Durand, realizaron una asamblea la semana pasada que surgió desde abajo, logrando imponer a mano alzada el paro de 24 horas que se realizó este jueves. Frente a la asamblea, la delegación de Sutecba se vio obligado a acatar lo resuelto y escribir un pliego de reivindicaciones, cómo el aumento para todos y plus sanitario y el pase a planta de los contratados. El jueves también se unieron a la medida los hospitales Ramos Mejía y de Niños Ricardo Gutiérrez.
En la acción de este jueves entrevistamos a Victoria, enfermera de guardia del hospital, que nos relató que otro de los motivos por el que se paró es el reconocimiento profesional de los enfermeros en la Ciudad de Buenos Aires. Además de exigir el pase a planta permanente a todos los trabajadores y obviamente los reclamos salariales, donde la mayoría del personal tiene ingresos por debajo de línea de la canasta básica familiar.
También un trabajador administrativo del hospital, nos resaltaba la importancia de la unidad para conquistar las reivindicaciones “Siempre la salud quedó relegada en el fondo para el gobierno, y se vio más dramatizada la situación nuestra durante la pandemia. Entonces yo veo que es el momento de sumar un montón de fuerzas y está buenísimo que todos se sumen. Porque es la única forma de dar batalla a este gobierno que cada vez más nos deja sin oxígeno”.
De norte a sur de nuestro país, los trabajadores de la salud vienen realizando asambleas, jornadas de lucha parciales, abrazos, movilizaciones, de manera autoconvocada y otras forzando a la burocracia a sumarse a las luchas, como el ejemplo histórico de Daer quien terminó marchando con los trabajadores de los hospitales y clínicas privadas. O en el Hospital Garrahan, donde los trabajadores vienen de 10 jornadas de paro, que incluyeron 48 horas de paro y que impulsan la mayor unidad posible, con fondos de huelga porque intuyen que las luchas por librar son duras.
En el corazón de la provincia de Neuquén ocurrió un hecho que nos marca el camino a seguir: durante días y días vimos como en asambleas conquistaron la simpatía de la población y con el más amplio apoyo popular le torcieron el brazo al gobierno y consiguieron un 50% de aumento para todos los estatales.
Si Neuquén pudo, se puede de norte a sur del país. Los Elefantes podemos salir en manada en la perspectiva de una gran acción nacional, como insistimos sin cesar, con asambleas para discutir entre todos medidas de fuerza que unan los 34 hospitales de CABA, que es una moción que empezó a circular desde el hospital Durand.
Con la pandemia en nuestras espaldas que nos dejó un tendal de compañeros en el camino y con paritarias a la baja firmadas o apañadas por todos los sindicatos de salud, que quieren seguir dividiéndonos más, nos estamos poniendo en movimiento.
Por abajo el reclamo de juntarse es cada vez más fuerte. Para romper el cerco al que nos atan Sutecba, Ate, AMM, Fatsa, etc. que evitan llevar adelante un enfrentamiento con los planes de ajuste del gobierno nacional, de las provincias y municipios, tenemos que unir a todos los sectores por hospital y lograr el apoyo de las familias que a diario asistimos. Fuerza de elefante tenemos de sobra para torcerle también el brazo al gobierno nacional y triunfar como ganaron en Neuquén. |