Uno de los principales acuerdos que comprende el T-MEC (USMCA por sus siglas en inglés) es sobre la industria automotriz, el contenido regional y los salarios en este sector.
Los requerimientos que el gobierno de Joe Biden está imponiendo sobre las reglas de origen relativas a la industria automotriz ha generado diferencias de Estados Unidos con México y Canadá, que de no resolverse supondrían la imposición del arancel de 2.5% para México y Canadá.
El desacuerdo se está suscitando en la forma para calcular el porcentaje de un vehículo, en particular en la acumulación de origen para que un producto sea exportado. Estados Unidos insiste en que es el "porcentaje neto” el que se debe usar para calcular el valor del contenido regional (VCR).
México y Canadá plantean que el cálculo debe redondearse al 100% toda vez que se cumpla con el contenido regional indicado en el tratado. Por ejemplo, si un motor se exporta de México a Estados Unidos con un contenido regional del 80%, ese porcentaje debe redondearse al 100% toda vez que ya cumplió con la regla de origen, y sumarse al contenido regional exigido para el automóvil al que será incorporado dicho motor o autorparte, y así liberarse del arancel del 2.5%. Estados Unidos sostiene que es el 80% y no el 100% el que debe sumarse.
Por ello, Tatiana Clouthier, secretaria de Economía, se reunirá con Katherine Tai, presentante comercial de Estados Unidos, para llegar a un acuerdo sobre las reglas de origen en la industria automotriz. Algunos economistas afirman que de no llegar a un acuerdo pronto, las renegociaciones afectarán el tipo de cambio que además con la propagación de la nueva variante delta, repercutirán en la economía de México.
El T-MEC en el capítulo 4 "Reglas de Origen" establece los requisitos para que un bien o producto puede ser considerado “originario” y obtenga las preferencia arancelaria negociada. El VCR pasó del 62.5% a 75% con el actual tratado, lo cual debe implementarse en un plan escalonado de tres años.
Entre las reglas de origen que fueron modificadas respecto al TLCAN, se encuentran el sector químico, las manufacturas eléctricas, de vidrio, y TV´S y proyectores, goma arábiga, fibra óptica, productos de titanio y acero, así como en el sector automotriz.
Los elementos centrales de la regla de origen automotriz se encuentran: 1. El valor del contenido regional (VCR) del 75 % para vehículos y camiones ligeros; 2. El valor del contenido laboral (VCL), 40% para vehículos ligeros y 15% para camiones ligeros; 3. Las autopartes esenciales deben ser originarias y; 4. El acero y aluminio originario debe cumplir el 70%.
Lo que ahora se pone a discusión por Estados Unidos tiene que ver con el principio de acumulación o "roll-up" el cual es parte del artículo 4.11 del T-MEC. Esto quiere decir que una mercancía o bien producido se convierte en originaria como resultado de la producción final, aún al utilizar un material no originario -es decir, que no provenga de México, Estados Unidos o Canadá- si al final cubre con el 75% acordado.
Es decir, en el ejemplo que poníamos, si una de las autopartes cumple con el 75% del VCR final, se le tomará a la armadora como un 100%.
Aún cuando el acuerdo parecía claro para los tres países, ahora con el gobierno de Joe Biden cambia el panorama de negociación pactado con Trump.
México es el mayor exportador en el mercado automotriz del T-MEC. De acuerdo al departamento de comercio de Estados Unidos y de la Organización Mundial de Comercio, en 2020, México exportó a EE.UU. 13,000 millones de dólares y hacia Canadá, 4,162 millones de dólares. EE.UU. por su parte, exportó 27,536 millones de dólares a México y 45,449 millones de dólares a Canada. El tercer socio comercial, Canadá, exportó a México 821 millones de dólares y a EE.UU. 45,572 millones de dólares.
Otro de los temas que está a discusión es el valor de contenido laboral que supone que entre el 40 y el 45% deben hacerlo trabajadores que ganen al menos 16 dólares la hora, eso equivaldría, con el tipo de cambio actual (320.96 pesos por dólar), a 2,567.68 pesos por una jornada de ocho horas; lo cual en México está lejos de ser una realidad.
Sobre el aumento salarial , empresarios han señalado que prefieren pagar el arancel del 2.5% antes que subir los sueldos. Francisco Méndez Aguiñaga, director de la región Bajío del Consejo Empresarial Mexicano de Comercio Exterior, Inversión y Tecnología (Comce), aseguró “Nosotros visualizamos que en la industria automotriz pueda hacérseles más fácil el pagar 2.5% de impuesto que incrementar la mano de obra a un monto de 16 dólares por hora, dado la depreciación” (El Universal, 24/09/2018).
En el marco del incremento de las tendencias proteccionistas en el contexto de crisis economía internacional, las recientes discusiones con el T-MEC abren un escenario de mayor subordinación de México al gigante imperialista del norte, Estados Unidos. |