Los Blaquier, dueños de un lote en el que hay canchas de futbol para uso de la niñez y juventud del barrio 23 de agosto, habrían vendido el predio al empresario Chemes, y este con la anuencia de la intendencia, descargo ripio para construir su 2da. expendedora de gnc. Hay indignación porque se intenta sepultar un espacio de uso social y deportivo para priorizar el lucro individual.

El jueves 22 de Julio descargaron ripio y arena en el espacio de deportes y recreación conocido como la “cancha de los pitufos”, fue el momento en el que lo que hasta entonces era un rumor, se convirtió en amenaza para la vecindad del barrio 23 de agosto, 518 viviendas y 540 viviendas que a diario durante más de 3 décadas le dan un uso social al espacio que cuenta con dos canchas de futbol, una de básquet y un lugar para hacer ejercicio al aire libre.

Quien pago el servicio del corralón santa rosa para la descarga de áridos en el lugar fue el empresario Gastón Chemes, dueño de un parador y una estación expendedora de GNC que se encuentra a la vera de la ruta nacional N°34. Este joven empresario que se maneja como patrón de estancia y mantiene en condiciones de precariedad laboral a los trabajadores de la expendedora de GNC y el parador cuenta a sus allegados que el predio es de su propiedad porque Ledesma SAAI se lo vendió hace casi un año. También el empresario habría iniciado tramites en el área de obras privadas de la municipalidad y su director le habría dado el visto bueno.

La indignación de vecinos/as de los barrios aledaños a las canchas y de la comunidad en general crece porque entre el comprador, Chemes, y el vendedor, Ledesma SAAI, con la complicidad de funcionarios de la intendencia Jayat, se está sepultando uno de los últimos espacios de deportes y recreación de uso gratuito que les queda a la niñez y la juventud de las barriadas humildes de Libertador, porque el emporio Blaquier concentra todas las tierras que hay alrededor del ejido urbano y se niega a entregar tierras para espacios verdes, obras públicas y viviendas, y porque cada vez crece más el negocio de predios privados donde hay que pagar alquiler por hora para practicar deportes como futbol, voley y básquet.

Los vecinos empezaron a impulsar un petitorio y a juntar firmas en defensa del predio como un espacio social, deportivo y recreativo del barrio 23 de agosto, en oposición a la instalación de la gnc en el lugar y por la declaración de utilidad pública de la parcela para que continúe teniendo un uso social y sea de los vecinos. Además, están preparando concentraciones en la cancha como también una movilización para exigirle a la intendencia y a los concejales, que todavía no han sentado posición, que defiendan el espacio deportivo y recreativo.

Desde las bancas legislativas del Frente de Izquierda y de los Trabajadores en Libertador se presentamos un proyecto de ordenanza para que se declare de utilidad pública el lote o parcela de la empresa Ledesma SAAI conocido como “cancha de los pitufos”, para invertir las prioridades y que se ponga el interés social, comunitario, deportivo y recreativo por encima del lucro individual. También desde la izquierda ingresamos al concejo deliberante un pedido de informe para que el funcionario a cargo del área de obras privadas de la municipalidad de Libertador envié un informe detallado adjuntando fotocopia de documentación de todo lo tramitado por el empresario Chemes en relación al lote o parcela ubicado en entre la ruta nacional N°34, la avenida Uzqueda, las calles Jacaranda y Diego Diez, que es donde está emplazado el espacio deportivo y recreativo vecinal en cuestión.