En el marco de la campaña electoral, el jefe de Gobierno porteño Rodríguez Larreta decide el regreso a la escuelas eliminando la distancia social en las aulas y la canasta alimentaria, sin ninguna medida ni inversión en conectividad, alimentación, ni vacunas para toda la comunidad educativa. En este marco, el sindicato porteño Ademys convoca a paro y asamblea y la comunidad educativa del barrio Bajo Flores realizará un corte por alimentación y vivienda.
La campaña electoral legislativa, con encuestas en mano, ya está en marcha, y el eje puesto en educación es parte de la agenda que ya se ve en los discursos de funcionarios y candidatos y hasta en algunos de sus videos de tik tok.
La realidad indica que la educación es una preocupación de jerarquía para el conjunto de las familias, jóvenes, y la docencia luego de año y medio de pandemia en que ni el gobierno porteño ni el de Alberto Fernández han invertido un solo peso. El Ministro de educación Nicolás Trotta, que se la pasó trabajando a la par de Soledad Acuña, ahora alerta sobre el distanciamiento en las aulas, pero su gobierno avanza en acuerdos con el FMI destinando miles de millones de dólares a una deuda que será pagada a costa del hambre y la miseria de las mayorías, trabajadores y trabajadoras, las familias de nuestras escuelas. Esa plata podría destinarse a la construcción de escuelas, a resolver los graves problemas edilicios o enfrentar en serio la terrible situación de hambre de miles de niños y niñas de las escuelas, pero parece no estar entre las prioridades de quienes se llenan la boca hablando de la educación. Plata hay, pero no para tomar medidas de fondo.
Horacio Rodríguez Larreta no se queda atrás. Anunció unplan de retorno total y progresivo de la presencialidad en las escuelas porteñas para luego del receso de invierno, aprovechando que desde nación no hay ninguna medida al respecto.
Así, el protocolo porteño elimina la distancia de 1,5m para prevenir el contagio de COVID-19 y somete a les estudiantes al hacinamiento en pandemia. Además de que mantiene la “ventilación cruzada” con temperaturas bajas y con el “consejo” a las familias de que los estudiantes lleven abrigo, cuando ya hay escuelas que han organizando “roperos” o hay familias a la intemperie peleando por vivienda, como en la 31, donde hay más de 100 familias y 175 niños y adolescentes que continúan resistiendo el desalojo. Al mismo tiempo que obliga a la asistencia para las y los estudiantes con una dosis, que eran exceptuados por factores de riesgo o convivencia con personas de riesgo.
Pero eso no es todo, Acuña anunció hace horas que no entregará más la canasta alimentaria, que la comunidad educativa junto a Myriam Bregman y Alejandrina Barry del Frente de Izquierda ganaron con un fallo para que les estudiantes puedan comer mejor en las escuelas.
Desde el Frente de Izquierda Unidad, los y las docentes que somos parte de las listas, queremos poner en cuestión la agenda sobre educación y la situación en que viven las mayorías de las familias trabajadoras de nuestras escuelas. Una tercera fuerza contra quienes se llenan la boca hablando sobre educación pero en un año y medio de pandemia no han tomado una sola medida favorable a las familias ni a las escuelas.
Por su parte, miembros de la comunidad educativa, entre los que se cuentan Cooperadoras y familias; el colectivo “Vacantes para todos”, vienen denunciando los bajos presupuestos en educación votados por el oficialismo junto a sus socios de Gen, el Socialismo, Confianza Pública y la UCR. Los únicos que se benefician son los dueños de las concesionarias alimenticias, que se hacen de grandes contratos, mientras aumentan sus ganancias en base a la precarización de sus trabajadores.
La UTE/Ctera de campaña, dándole la espalda a la comunidad educativa
El lunes 2 de agosto se cumplen 3 años del crimen social de Sandra y Rubén, y las escuelas "reciben" a lxs estudiantes sin haber destinado plata para evitar el hacinamiento, con graves problemas edilicios y con el riesgo de la variante Delta como parte de la situación epidemiológica. Sumado a que más de la mitad de los niños, niñas, y jóvenes son pobres y se les niega una alimentación en calidad y cantidad.
Pero, lejos de ver esto como un gran problema de la educación pública, la dirección del sindicato mayoritario de la Ciudad de Buenos Aires, estuvo todo el año preocupado por ser parte de la lista del Frente de Todes porteño, que terminó encabezando Santoro, un ex radical que se pronunció en defensa de la policía y las pistolas Taser,fuerza política que además votó a los jueces que fallaron contra la comunidad educativa en el debate por un retorno seguro a las escuelas y no en organizar a la docencia y su comunidad educativa para enfrentar el gobierno de Larreta. El peronismo en la Ciudad no solo no fue oposición en la Legislatura donde votaron parte de las leyes que ajustaron a les trabajadores, sino que como conducción de poderosos sindicatos como el Subte, docentes, telefónicos, camioneros, aeronáuticos y estatales, entre otros, y como parte de los movimientos sociales y centros de estudiantes no buscaron salir a las calles contra el gobierno local.
Construir la fuerza desde abajo para pelear por la educación pública
“Con hambre, sin conectividad, ni vivienda digna se puede estudiar”, con este lema la Asamblea Abierta del Bajo Flores, organizada junto a las familias, docentes y estudiantes, convoca a un corte a las 12hs en Cobo y Curapaligue y luego una movilización al IVC contra el recorte de las canastas escolares, por conectividad gratuita y vivienda digna. En el mismo horario, Ademys en el marco de un paro de 24hs llama a una conferencia de prensa desde la Jefatura de gobierno porteño.
Por la tarde se realizará la asamblea abierta virtual docente, en donde de la corriente nacional 9 de abril, como parte del PTS en el FIT Unidad en el que se encuentran Alicia Navarro Palacios, directora de la Villa 20, Marilina Arias, ex miembro de la directiva de Ademys y Federico Puy delegado por Ute-Ctera del Normal 5, cómo candidates docentes en estas elecciones, proponen organizar las fuerzas necesarias con todos aquellos y aquellas que realmente quieran enfrentar el ajuste del gobierno nacional y las políticas de Larreta y Acuña que atentan contra la educación, no tomando ninguna medida de fondo ante la crisis, en cada barrio, de todos los sindicatos y centros de estudiantes, con las familias, los colectivos educativos, para imponer de abajo hacia arriba un plan de lucha para que esta crisis no la paguen las familias de las escuelas.
De conjunto, el Frente de Izquierda Unidad está proponiendo una serie de medidas para que la crisis no la pague el pueblo trabajador. No votar como los ricos y millonarios del país y darle más fuerza a los reclamos del pueblo trabajador con diputados y diputadas que, en las calles y desde sus bancas como puestos de lucha, puedan incidir con la agenda de la clase trabajadora. Pero sabemos que los dueños “votan” todos los días imponiendo sus decisiones. La pelea sin descanso es que sea la clase trabajadora junto con su organización, tome partido para hacer valer su poder y decidir su propio rumbo. |