Los trabajadores de un sector estratégico como lo es el petróleo se movilizaron a pesar de contar con una dirección burocrática en su sindicato que busca perpetuar la inmovilidad de sus agremiados. El Gobierno y los líderes sindicales charros saben el peso que tienen los trabajadores petroleros, quienes, si se dispusieran a luchar paralizando sus centros de trabajo podrían poner a temblar a las instituciones del Estado.
En esta ocasión el bloqueo carretero fue parte de una acción coordinada donde participaron 36 sindicatos diferentes según informaron los organizadores de la acción. Los reclamos expresados hacían énfasis en la defensa de sus derechos laborales.
Daniel Tiscareño integrante del sindicato, uno de los representantes de la delegación Salamanca, comentó que se han enfrentado a problemáticas como la discriminación a personas que quieren seguir trabajando y no pueden ascender laboralmente, pese a tener conocimientos, mientras se han presentado irregularidades como la venta de plazas.
Es importante comentar que, durante las 3 horas de bloqueo parcial de la circulación del tramo carretero, arribaron elementos de la Guardia Nacional hecho que muestra una vez más que esta institución, está pensada para jugar un rol represivo en contra de trabajadores o sectores populares que salgan a luchar por sus derechos.
Recién a finales de junio, integrantes de la Unión Nacional de Técnicos y Profesionistas Petroleros (UNTyPP) se habían manifestado fuera de los complejos petroquímicos de la zona sur y las oficinas administrativas de Petróleos Mexicanos (Pemex) rechazando la modificación de la edad jubilatoria que busca implementar el gobierno federal.
Y es que se está buscando terminar con el régimen de jubilación con el que cuentan los trabajadores de Pemex buscando acabar con la jubilación anticipada a los 55 años, esto producto de los ritmos que mantienen los trabajadores del sector, mucho más extenuantes que en otras ramas, pero sobre todo dado el peso que tienen en la economía nacional. Por ello el Estado mexicano ha optado durante décadas por darles ciertas concesiones a los petroleros para así mantenerlos “tranquilos” en el marco de sostener alianzas con líderes sindicales corruptos.
Si los petroleros salen a luchar, pueden ser un aliciente muy importante para otros gremios, algunos más activos como los mineros o los docentes, y otros más controlados y donde hay menos vida sindical como los de distintas industrias.
Al final, los trabadores siguen siendo la fuerza social que mueve fábricas, escuelas, hospitales, transportes, puertos, bancos, etc. Por lo que es muy importante que los trabajadores de todos estos sectores se vean como parte de una misma clase que puede luchar por conquistar derechos y defender mejores condiciones de vida para las mayorías.
Mientras tanto, cientos de trabajadores petroleros salieron también a la torre ejecutiva de Pemex y a la Secretaría de Gobernación donde presentaron sus peticiones buscando defender sus conquistas, así como el reconocimiento de su labor sindical, una pequeña demostración de fuerza en un gremio que, por el lugar que ocupa en la producción, puede jugar un rol fundamental que doble los ataques de cualquier Gobierno y de la patronal. |