En la mañana de este martes continuaron las repercusiones generadas por las declaraciones del infectológo Eduardo López, que había dicho que "tener cinco millones de dosis en heladeras es un fracaso del sistema". La cifra a la que hizo alusión López corresponde a la diferencia que existe entre las vacunas adquiridas y distribuidas por el Estado nacional y las que fueron aplicadas.
Según los últimos datos disponibles en el Monitor Público de Vacunación, 44.491.834 son las dosis distribuidas por el Estado y 39.605.804 son las dosis aplicadas hasta el momento.
Desde el Gobierno le respondieron a López a través de varias instancias. Por un lado, se difundió un comunicado del Ministerio de Salud en el que se afirma que "lejos de ser un fracaso" el proceso de vacunación es un "logro".
En el texto, las autoridades del Ministerio afirman que "lejos de ser un fracaso, el proceso de sacar las vacunas de Ezeiza, controlar la temperatura, volver a empaquetar, mandar a las provincias y que las provincias lo distribuyan a todos los vacunatorios de su territorio, es un gran logro del sistema". Y agregaron que “si bien el promedio en el ritmo de vacunación es bueno, no es homogéneo en las distintas jurisdicciones del país, ya que cada territorio presenta diferentes complejidades".
Por otro lado, en la mañana de este martes los que respondieron fueron funcionarios como Carla Vizzoti, ministra de Salud nacional y Nicolás Kreplac, ministro de Salud bonaerense. En tanto que Vizzoti expresó que "no hay ninguna vacuna en la heladera”, Kreplac manifestó que no existen vacunas, al menos en la provincia de Buenos Aires, acumuladas y guardadas en ninguna heladera".
Vizzotti hizo sus declaraciones al arribar este martes al país a bordo de un avión proveniente de Rusia que contenía además un cargamento de 650.000 dosis de Sputnik V. La ministra sostuvo que “cada vacuna que llega está en constante movimiento desde que baja del avión hasta que llega al operador logístico, se distribuye en las provincias, luego a los vacunatorios, se dan los turnos, se aplica la vacuna y se registra”, describió la ministra e indicó que se trata de “un proceso sostenido. Cuando hay un ingreso muy grande de dosis, esa diferencia se agranda, y a medida que se van aplicando las vacunas se achica hasta que llega otro ingreso de vacunas grande”.
La polémica sobre las vacunas se da en un momento en el que la variante Delta comienza a provocar las primeras víctimas fatales y en importantes zonas, como la provincia de Buenos Aires, ya hay circulación comunitaria.
Ante el avance de esta variante es clave que la población se encuentre protegida con el esquema de vacunación completa, es decir con las dos dosis. Y precisamente ese es otro de los puntos débiles de la campaña de vacunación. Según los datos del Monitor, solo 12.274.825 personas recibieron las dos dosis de un total de 27.330.979 vacunadas.
Más allá de las polémicas, lo que es cierto es que a un año y medio de iniciada la pandemia, el acceso a las vacunas sigue siendo uno de los problemas cruciales, y no solo en Argentina.
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