Álvarez, EVOPOLI, argumenta que "afecta la credibilidad general de lo obrado por el movimiento político denominado La Lista del Pueblo”, pero parecieran olvidar los antecedentes de los partidos de los 30 años con financiamiento irregular de campañas, con años de robos económicos que se han mantenido en la más completa impunidad.

Este pasado jueves, Servel rechazó la candidatura presidencial del ahora ex candidato de la Lista del Pueblo, Diego Ancalao, ya que mas de 23 mil firmas que junto para su patrocinio fueron inscritas ante una notaria que dejó de funcionar hace más de 3 años, y además que fue firmado ante el notario Patricio Zaldivar Mackenna quien falleció en febrero de este año.

Ante esto, el diputado Sebastián Álvarez (evópoli) planteó que el Servel debería entregar los patrocinios de los constituyentes de la Lista del Pueblo, argumentando que "afecta la credibilidad general de lo obrado por el movimiento político denominado La Lista del Pueblo”. Este juicio lo realizó sin hacer mención a las y los constituyentes que no pertenecen a aquella colectividad

Ante tal propuesta se da a entender una de las incontables contradicciones con respecto a las campañas, ya que militantes tanto de Chile Vamos y la ex concertación presentan antecedentes de irregularidades en el financiamiento de campañas como los casos Iván Moreira (UDI), el presidente de la DC, Fuad Chahín; al presidente de la UDI, Javier Macaya; al ex senador y ex ministro Alberto Espina (RN); al actual alcalde de La Florida, Rodolfo Carter; a los senadores Felipe Kast (Evópoli), Ena Von Baer(UDI), Francisco Chahuán (RN) y Felipe Harboe (PPD), como entre otros casos revelados por Ciper hace casi un año.

Lo más grave, es que los casos que involucran a los partidos de los 30 años se han mantenido en la más completa impunidad y ahora buscan equiparar un desfalco financiero con la falsificación de una firma. Ambos deben ser denunciados, pero la gravedad es altamente desproporcional.

Además que los partidos de " los 30 años", en conjunto con el FA, establecieron trabas para las listas independientes de aquellos conglomerados para la campaña de la convención constituyente. En otras palabras, a pesar de estar amparados por los grandes empresarios, utilizaron mecanismo del estado para favorecer sus campañas, en desmedro de las otras colectividades.