Tras llevar ya varios días de acampe, el gobierno municipal del hoy intendente Damian Celsi quien asumió en el cargo tras la licencia de Zabaleta, no dudo en mandar la policía municipal y llevarse detenidas a Verónica Villamarin y Natalia Jimena Gallegos, quienes se encontraban en el acampe para impedir que se continúe la obra que cruza el arroyo Morón.
Es una obra que se comenzó hace 4 meses con la traza y construcción de una camino que uniría la autopista del Ayre, hasta la ruta 4 por la llamada Avenida Combate de Pavón concluyendo por un puente sobre el arroyo Morón por parte de Vialidad De la Provincia de Buenos Aires. Es un proyecto que se había iniciado en el gobierno de María Eugenia Vidal y que hoy, el Gobierno de Kicillof continúa.
Organizaciones ambientalistas de la zona denuncian que la obra que cruza el arroyo, no cuenta con una audiencia pública, ni con los estudios de impacto ambiental, y que esta construcción “lo que está trayendo es un sinfín de complicaciones para la comunidad vecina de la zona del barrio Jorge Newbery, y muchísimas preocupaciones por parte de los vecinos del barrio altos de Podestá, a quienes le pasaría la obra pegada a sus casas” afirman de la organización Hurlingham Siempre Verde.
Lo que vienen denunciando los vecinos, es la destrucción de un espacio verde con flora y fauna propia.
Esta lucha lleva un tiempo, cuando en Abril de este año presentaron un recurso de amparo para impedir que avanzan las topadoras y arrasaran con la flora y fauna que hay a los costados de la vera del arroyo Morón.
Desde el gobierno nacional, provincial y municipal, se arman relatos sobre la defensa del medio ambiente, pero las acciones esto se traslada a favor de los negocios inmobiliarios, del agronegocios, entre otros.
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