El Frente de Izquierda logró una elección histórica en Jujuy. Con más del 97 % de los votos escrutados, alcanza un 23.31% de los votos. Si estos resultados se mantuvieran en noviembre, Alejandro Vilca podría alcanzar una banca en el Congreso Nacional.
Con más de 81000 votos, la izquierda llegó al segundo lugar en San Salvador de Jujuy, Palpalá, Caimancito. Otra gran elección se hizo en Humahuaca en donde se dio prácticamente un empate entre las tres fuerzas. Los porcentajes más altos se dieron en las barriadas obreras y populares de la capital, como Alto Comedero, Villa San Martín, Villa Belgrano, El Chingo, Punta Diamante, Campo Verde, Malvinas Argentinas, San Pedrito, entre otras.
Con respecto a las elecciones provinciales de junio, el Frente de Izquierda Unidad fue la fuerza política que más creció pasando de 27341 votos a 81613.
Por su parte, el Frente Cambia Jujuy del gobernador Morales se impuso con un 46,4%. Sin embargo, con respecto a junio retrocedió en 20000 votos, si se computa lo alcanzado en la elección provincial por el frente oficialista y Primero Jujuy del vicegobernador Haquim. De esta manera, se dificulta la pretensión de quedarse con los tres diputados en disputa, ya que de repetirse estos mismos resultados en las generales de noviembre se llevaría un diputado cada fuerza política.
El peronismo unido en torno al Frente de Todos, quedó en segundo lugar con un 28,3%, menos de cien mil votos, sin lograr sacar una ventaja definitiva sobre el Frente de Izquierda que quedó a sólo 5% y en carrera para pelear el segundo lugar en la elección general de noviembre. En junio, el peronismo se había presentado en distintas listas alcanzando entre todas alrededor de 117000 votos, no pudiendo retener el conjunto de los votos del espacio.
En cuanto a la interna del Frente de Izquierda, la lista "Unidad de la Izquierda" encabezada por Alejandro Vilca, Natalia Morales y Gastón Remy sacó una clara y amplia ventaja sobre la opción encabezada por Betina Rivero "Revolucionemos la Izquierda". La diferencia fue de 79% a 21% para los primeros que se consagraron como los candidatos del espacio de cara a noviembre.
En este sentido, las elecciones dejaron a un oficialismo ganador pero con el sabor amargo no solo de quedar muy lejos de llevarse los tres diputados como ansiaba; si no incluso ante la posibilidad de que la izquierda le arrebate un diputado luego de su elección histórica. Una izquierda que creció sobre un voto peronista y de otras fuerzas que no se presentaron en las PASO y sí lo habían hecho en junio.
Una campaña a pulmón, desde abajo...
La campaña del FITU dio impulso a una intensa militancia de obreros rurales del tabaco, en las fincas y barriadas populares, en los cosecheros del citrus, sectores de los más explotados y olvidados si los hay, pese a integrar una de las actividades de mayor producción de riqueza de la provincia. Un dato sintomático de los cambios que se vienen por abajo.
El apoyo al FITU también es por su propuesta de llevar una Ley de interzafra para que las familias de las y los trabajadores rurales no pierdan sus derechos una vez finalizadas las cosechas.
Además, durante la campaña se vio un enorme apoyo en choferes de colectivo, vendedoras ambulantes, trabajadores estatales, docentes y de la salud, movimientos sociales y trabajadores desocupados. Como también en sectores de la juventud estudiantil y trabajadora que en el marco de la campaña realizaron un importante encuentro juvenil de apoyo al Frente de Izquierda.
... y contra los poderosos
Esta buena elección de la izquierda es un importante mensaje a los poderosos y frente a un régimen bipartidista tradicional, que luego de las elecciones provinciales de junio salió fortalecido y redobló su carácter autoritario contra el pueblo trabajador y sus luchas. El desafío para la izquierda está en ganar más fuerzas militantes de trabajadores y jóvenes para dar batalla en todos los terrenos, sindicatos, centros de estudiantes y fortalecer de conjunto una salida propia de la clase trabajadora a la crisis que los poderosos y sus partidos quieren que la pague el pueblo.
“Nuestro objetivo es utilizar el resultado de las PASO de cara a las generales y llegar a cada vez más trabajadores, mujeres, jóvenes e integrantes de los pueblos originarios para que se organicen junto a la izquierda. El histórico resultado obtenido nos deja con buenas perspectiva de cara a noviembre para conquistar una banca para las luchas del pueblo trabajador. Esta gran elección es resultado del apoyo, el esfuerzo y compromisos de centenares de trabajadores y trabajadoras de lo sectores más humildes de toda la provincia”, sostuvo Alejandro Vilca, candidato a diputado nacional del FITU.
La pelea no será nada fácil, puesto que se trata de enfrentar a los dos grandes partidos que gobiernan la provincia según ordenan los grandes empresarios y terratenientes que siguen amasando fortunas. Son estos mismos partidos los que han forjado un régimen policíaco de persecución, represión y proscripción. Noviembre puede transformarse un mes de revancha para todos y todas los agraviados por este mismo régimen.
Entrevista a Alejandro Vilca en Radio Con Vos | 
