Vecinos asambleístas de Villa La Ñata y Dique Luján, en compañía de músicos zonales y otros sectores, impulsaron este domingo una jornada de protesta, una “Carpinchada”, en la rotonda de Nordelta de Ruta 27.
Los carpinchos profundizaron el reclamo que vecinos y asambleístas desde hace muchos años vienen llevando adelante desde el comienzo del mega avance inmobiliario de Nordelta y otros complejos en la zona de humedales de Tigre y Escobar.
La jornada de visibilización y protesta de este domingo se realizó con actividades culturales y habladas para exigir el freno inmediato de la construcción y ampliación de barrios privados sobre territorio de humedales.
Se hicieron presentes músicos y músicas de la zona que siempre acompañan como Copleres del Humedal, Fermín, Cintia Arévalo, Carlos María Seta, ambientalistas, biólogos y geógrafos de Dardo Rocha, SOS Humedales Escobar, entre otras organizaciones y vecines.
Responsabilizan a las empresas C&E y EIDICO, grandes constructoras privadas y ligadas a la obra pública e intereses de todos los gobiernos. Se denuncia además que estas empresas continúan avanzando con la complicidad de los gobiernos locales de Tigre y Escobar y del Gobierno provincial beneficiando los negocios inmobiliarios millonarios, a costa de la destrucción de los humedales.
Además se planteó que el proyecto aprobado a fines del 2019 denominado “Distrito de Gestión Especial Planicie del Río Luján”, sólo quedó en los papeles y no se cumple la preservación de humedales continentales.
La Ley de Humedales que vienen reclamando un conjunto de Asambleas vecinales y territoriales, sectores populares, ambientalistas, profesionales, organizaciones sociales y políticas a lo largo y ancho del país con movilizaciones, cortes y distintas acciones, viene siendo cajoneada desde hace años. Recordemos que miles se movilizaron de Plaza de Mayo al Congreso luego del desembarco de la caravana de kayaks en agosto pasado, junto a cientos de jóvenes para exigir el tratamiento de la ley de forma urgente.
Este año se quemó el 20% del Delta, unas 500.000 hectáreas, producto de los incendios intencionales que el gobierno nacional ni apagó, ni hubo un sólo castigo a los responsables.
Cabe preguntarse si con el presidente de la cámara de Diputados, Sergio Massa, bajo el cual prosperaron enormemente los negocios de los countries y junto al flamante ministro de Agricultura, Pesca y Ganadería, Julián Dominguez, con múltiples lazos con los empresarios del agronegocio y la Sociedad Rural, cajonearán una vez más la Ley de Humedales para perpetuar el negocio inmobiliario y del agro.