Mediante un comunicado, el Ejército Zapatista de Liberación Nacional denuncia que, el secuestro de dos indígenas integrantes de las comunidades autónomas Moisés y Gandhi fue perpetrado por un grupo paramilitar ORCAO, financiado directamente por el gobernador de Chiapas, Rutilio Escandón y a la Secretaria General de Gobierno Victoria Cecilia Flores Pérez.
El Subcomandante Galeano, en nombre del Comité Clandestino Revolucionario Indígena-Comandancia General (CCRI-CG), denunció la escalada de agresiones hacia las comunidades autónomas pertenecientes al Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN) por parte de un grupo paramilitar que se denomina Organización Regional de Cafeticultores de Ocosingo (ORCAO).
Este grupo paramilitar ha venido constantemente agrediendo a esas comunidades en los últimos meses, y rel 11 de septiembre perpetró el secuestro de dos integrantes Sebastián Núñez Pérez y José Antonio Sanchez Juárez, autoridades autónomas de la junta de buen gobierno de Patria Nueva, Chiapas.
A su vez, el comunicado denuncia que este grupo es financiado por el gobierno del estado de Chiapas y responsabiliza directamente al gobernador Rutilio Escandón y a la Secretaria General de Gobierno Victoria Cecilia Flores Pérez, que reprimen al magisterio y a las normales rurales, al mismo tiempo que retrasan la llegada de vacunaciones a las comunidades más alejadas, con el objetivo de "desestabilizar el gobierno de López Obrador".
Por último llamaron a las organizaciones adherentes a la Sexta Declaración de la Selva Lacandona y simpatizantes de las bases zapatistas a manifestarse este 24 de septiembre.
Cabe mencionar que, tras las protestas del 27 de agosto en el estado, los mismos docentes han denunciado la cerrazón por parte del gobierno local y federal para atender sus demandas, y denunciaron también el linchamiento mediático orientado por Presidencia para imponer el regreso forzado a clases aún en un pico de la pandemia.
El hostigamiento constante por parte de grupos paramilitares y militares busca avanzar contra quienes se oponen al despojo de la tierra y los megaproyectos que sólo benefician al imperialismo, como el Tren Maya.
Es preciso rechazar la represión que mantienen estos grupos en complicidad con los tres niveles de gobierno contra las comunidades zapatistas y a su vez, las organizaciones de Derechos Humanos y sindicales deben exigir el cese de las agresiones por parte de grupos militares y paramilitares contra los que luchan. |