En la actualidad, el Salario Mínimo, Vital y Movil, en $ 29.160, se encuentra bajo la línea de indigencia. Un botón de muestra del ajuste enorme que está realizando el Gobierno sobre las vidas de millones de personas, mientras no tuvo ningún inconveniente en "honrar" cada vencimiento de deuda que tuvo, pagando miles de millones de dólares a los especuladores.
Hoy en día, si se transformara el monto del Salario Mínimo a kilos de asado, se podrían comprar 44 kilos, según el último dato disponible del Indec, que en agosto dijo que el asado costaba en Argentina $ 660,81. Lógicamente, la comparación es para graficar el precio. Nadie podría destinar un salario entero a comprar carne, pero sirve a modo de ilustración.
Con el aumento acordado hoy entre el Gobierno, los burócratas sindicales y las cámaras empresariales, el Salario Mínimo llegará a 33.000 en febrero de 2022. Con esa actualización, la capacidad de compra pasaría a ser de 50 kilos de asado, es decir 6 kilos más.
Esto suponiendo que se mantenga en febrero del año que viene el precio de agosto, lo que cualquiera sabe que no será así.
Las centrales sindicales, en vez de sacar comunicados en apoyo al gobierno en medio de semajante crisis social, económica y política, deberían ponerse a la cabeza de un plan de lucha por las demandas de trabajadoras, trabajadores y de los sectores populares.
Este martes, miles marcharon exigiendo un salario que cubra, como mínimo, la canasta familiar. El Gobierno dice escuchar el mensaje de las urnas, pero en cambio nombró a un nuevo gabinete derechizado y sigue con una política de ofrecer migajas a los que menos tienen, mientras este mismo miércoles pagará miles de millones al FMI. |
