Javier Brat
| Delegado de la DGMus-ATE y de la Marrón Clasista
El viernes 17 un colectivo de organizaciones por la Libertad a Presas y Presos por Cannabis se concentraron en la Plaza Congreso para exigirle al Estado el fin de la persecución penal y policial a quienes cultivan y usan y hacen uso cannábico. Una política de Estado donde peronistas y macristas coinciden sin grieta.
Hoy en Argentina la discusión acerca del uso y producción del cáñamo para uso industrial y la explotación de la marihuana para uso terapéutico es una realidad. A partir de la sanción de la Ley 27.350 de 2017, su reglamentación del año 2020 y la reciente media sanción de la Ley Kulfas (de Producción e industrialización del cáñamo) en el Senado, es un tema candente.
A partir de la lucha de años de las organizaciones cannábicas y de la izquierda (como el PTS y su referente Nicolás Del Caño), con movilizaciones masivas y presentando proyectos de Ley ante el Parlamento, es que hoy el tema ya es parte de la realidad y de la agenda política y social.
Pero hay un tema del que pocos hablan y el gobierno nacional viene cínicamente silenciando: les presos y presas por plantar marihuana. Al día de hoy y con una reglamentación que “permite” la actividad a los autocultivadores (vía el ReProCann) no cesan por parte del Estado los allanamientos, la persecución y el encarcelamiento de muchas personas por cultivar su medicina.
Desde hace tiempo, a instancia de personas privadas de su libertad por cultivar y usar cannabis y de sectores que luchan por la legalización y regulación, se vienen conformando diversas organizaciones. Muchas de ellas son fueron las convocantes de la concentración del pasado viernes en Congreso. Allí el reclamo de “ninguna regulación es posible con les pibes presos” se hizo escuchar. Y así lo explicaron ante La Izquierda Diario sus protagonistas.
Aquí hablan Pamela, compañera de Máximo López, detenido actualmente en el Penal de Sierra Chica. También hablan Denisse y su hija Luciana, quienes recientemente recibieron la libertad asistida tras más de dos años presas y aún procesadas. El hijo de Denisse, que con 14 años de un momento a otro quedó sólo, bajo la más absoluta desprotección al ser detenidas su madre y su hermana, también da testimonio. Como cuenta Luciana, “¡todo esto por tres plantas!”.
Acompañando este importanísimo reclamo, La Izquierda Diario también conversó con Horacio de Acción Cannábica y Nermi de El Jardín del Unicornio.
¡Ninguna regulación es posible con les pibes presos! ¡Basta de persecución a cultivadores/usuaries! ¡Regulación integral del cannabis para todos sus usos! ¡Amnistía para cultivadores y usuarios!
