Este jueves Antonio Caló dialogó en el programa radial "Habrá consecuencias" de El Destape y, tras ser consultado por el intento de las patronales de avanzar sobre las indemnizaciones, advirtió que "no tienen noción la defensa que van a hacer los trabajadores" para no perder un derecho tan elemental.
Incluso el titular de la Unión Obrera Metalúrgica (UOM) se refirió a los diputados de Juntos que esbozaron un proyecto al respecto. "Los diputados que lo tiraron me parece que ninguno de ellos se ha levantado un día a las cuatro de la mañana para ir a trabajar", dijo. Muy cierto, aunque venga de alguien que goza de privilegios similares y que pese a que debería defender los derechos de los trabajadores acordó una rebaja salarial del 30 % en plena pandemia.
Para que no queden dudas de qué lado está, Caló puso el mismo énfasis en defender los despidos con causa. Sí, las excusas patronales para dejar trabajadores en la calle y sin un peso. "Si el trabajador rompe una pieza o falta mucho, bueno lo podés echar con causa y no le pagás nada", afirmó, al tiempo que dijo que "si lo despedís sin motivo alguno, bueno, pagá".
En eso radica la "defensa" de Caló a los trabajadores del gremio, muy por detrás de la insuficiente prohibición de despidos puesta por el gobierno de Alberto Fernández durante la pandemia.
Las paritarias de la UOM
Recordemos que en abril pasado la conducción del sindicato acordó un aumento por el 35,2 %, el cual se realizó en tres "cómodas cuotas" que se terminaron de abonar con un 10 % este mes, con una revisión en diciembre, que adelantaron pedirán el 15 %. Es decir, el aumento no queda solamente muy por detrás de la pauta inflacionaria anual, sino de la que ya se sufrió en lo que va del año.
En las principales ramas, el salario para el personal mensualizado, arranca en $ 40.690 en abril; $ 44.228 en julio y será de $ 47.837 en 2022. En sectores de autopartes, para el caso del personal mensual, los salarios actuales arrancan en $ 48.408, pasarán a $ 52.618 en octubre y llegarán a $ 56.911 en 2022. Así lo señala la escala salarial.
Montos todos por debajo de la línea de pobreza, marcada según el Indec en $ 68.000 y por supuesto como es costumbre sin consultar a los más de 185.000 trabajadores y trabajadoras industriales que dicen representar.
No es casual que Antonio Caló se cuide de hablar si quiera de alguna medida gremial para defender los puestos de trabajo después de años de tregua con el gobierno y las patronales e inclusive negando los despidos del sector. |