De esos temas hablamos en la columna sobre noticias internacionales del programa de radio El Círculo Rojo, que se emite todos los jueves de 22 a 24 hs por Radio Con Vos.
Estados Unidos se vive un verano/otoño caliente de huelgas en la industria de la alimentación.
Los trabajadores esenciales durante la pandemia, se cansaron de los altos ritmos de producción y surgieron una serie de huelgas por mejores condiciones laborales.
Empecemos por la más reciente. Seguro conocen Kellogg’s, fundada a principios del 1900 además de los cereales también tiene otros importantes productos como las papas fritas Pringles.
Los 1.400 trabajadores de las plantas en Estados Unidos están en huelga cansados de las exigentes jornadas laborales y los recortes a sus derechos.
La empresa, que según el último informe financiero trimestral ganó unos 380 millones de dólares, impone jornadas de hasta 12 horas y peores contratos a los trabajadores nuevos.
Rob Long, un trabajador que está hace 11 años en la empresa le contó a la agencia AP que la Kellogg’s otorga menos beneficios y menos paga a los trabajadores más nuevos.
La huelga está en los principales medios de Estados Unidos, con la imagen de piquetes en las puertas de las fábricas donde se canta “Nuestro futuro no está en venta”. Para que se den una idea, son similares a las del capítulo de los Simpsons cuando Homero encabeza una huelga en la planta nuclear.
Hablaba de un verano/otoño de huelgas, en el país, porque la de Kellogg’s no es la única.
En Kentucky, desde hace cuatro semanas los 420 trabajadores de la destilería Heaven Hill están de paro.
A principios del verano en el norte, 600 trabajadores en una planta de Frito-Lay en Kansas, y más de 1,000 trabajadores en cinco plantas alrededor del país de Nabisco Mondelēz también pararon.
En Nabisco Mondelēz los trabajadores llegaron a tener jornadas de 16 hs de trabajo. Todo estalló cuando la empresa propuso flexibilizar más el ritmo laboral: turnos rotativos de 12 horas y de tres a cuatro días.
Mientras tanto, los ingresos de la empresa aumentaron casi un 60 % con respecto a 2020 y el director ejecutivo de Mondelēz, Dirk Van de Put, recibió 16 millones de dólares en 2020, que equivale a 544 veces el salario medio de un trabajador de la compañía.
Lo que llama la atención en Estados Unidos es la cantidad inusual de huelgas. Kellogg dice que esta es la primera desde 1972. En Nabisco la anterior había sido en 1969.
Estos paros en la industria de la alimentación se suman a los intentos de sindicalización como en Amazon, huelgas en otros sectores como los mineros en el norte de Alabama o los carpinteros en Seattle.
En un país donde los derechos laborales fueron duramente atacados, los trabajadores empiezan a levantar la cabeza, y seguramente, como canta Lisa Simpson en el capítulo que les mencione antes, entendieron que “ellos tendrán las fábricas, pero nosotros tenemos el poder”