El Gobierno nacional, con apoyo de partidos de la oposición y los gobiernos provinciales de distintos signos políticos (peronismo, radicalismo, pro), quieren avanzar con la ley de promoción de hidrocarburos que busca extender la exploración petrolera no convencional, que no es otra cosa que el fracking. En consonancia con esto, el gobierno provincial avanza también en el programa “Mendoza activa hidrocarburos”. Este 11 de octubre, día mundial contra el fracking, salimos a las calles en Mendoza y en todo el país, a demostrarle a los gobiernos que esta práctica contaminante no tiene licencia social.
En un mundo que sufre las consecuencias del calentamiento global por causa de la quema de combustibles fósiles, necesitamos ir hacia una transición energética que adopte el uso de energías limpias, cambiando además todo nuestro sistema productivo para hacerlo compatible con el cuidado del ambiente. El fracking, además de sus consecuencias contaminantes inmediatas (uso de agua, riesgo de contaminación de acuíferos, sismos, etc), es justo lo contrario a esta necesidad que hoy cada vez más personas exigimos; pues su objetivo es justamente extraer todo el petróleo disponible para darle continuidad al modelo extractivista y contaminante del capitalismo.
Los gobiernos capitalistas y sus partidos aliados, buscan promover la exploración no convencional de gas y petróleo, brindándole beneficios impositivos y financieros a las petroleras bajo la falsa promesa del desarrollo, buscan generar dólares que serán para pagar la deuda fraudulenta del FMI y por ende menos dólares para salud, para educación y para vivienda. Los mismos que desde el discurso buscan cubrirse con una fachada verde, cooptando incluso sectores del ambientalismo que, ingenuamente o no, se prestan a su farsa, son los que promueven este modelo extractivista. Pretender que estos sectores (PJ, Pro, Radicalismo, Partido Verde, etc), que representan los intereses de la clase capitalista, son los que van a conducirnos hacia un modelo de transición energética, es caer en una absurda contradicción; alzar sus banderas (aunque estén pintadas de verde) es alzar las banderas del extractivismo. La salida la tiene que dar el pueblo organizado, los trabajadores y las clases oprimidas, que somos los que más sufrimos las consecuencias de la devastación ambiental y los que buscamos el bien de las mayorías.
En oposición al proyecto de ley oficial, y desde el año 2014 (cuando los gobiernos impulsaron la anterior ley de hidrocarburos favoreciendo a Chevron), desde el PTS venimos impulsando proyectos de ley alternativos, proponiendo la nacionalización de toda la industria hidrocarburífera bajo la administración de los trabajadores. Estableciendo la creación de un Consejo General donde tengan participación representantes de pueblos originarios, ambientalistas y profesionales de las universidades públicas. Y en nuestros proyectos somos claros en relación a la utilización del “fracking” como método de extracción de gas y petróleo, prohibiéndolo en todo el territorio nacional. En particular en Mendoza en 2018 también desde el PTS se presentó un proyecto de ley para prohibir el fracking en todo el territorio provincial exponiendo varios casos de derrame que se sucedieron en el departamento de Malargüe y que fueron denunciados por las comunidades originarias y pobladores locales. Desde entonces hemos acompañado a las asambleas del agua, apoyando y presentando proyectos locales que buscan prohibir el fracking en los diferentes departamentos; además de la constante presencia en las calles siendo parte de todas las luchas ambientales.
Para proteger la naturaleza y frenar la avanzada extractivista del capitalismo, sus gobiernos y sus aliados, es fundamental estar en las calles y organizarnos; por eso este 11 de octubre, todxs a las calles en defensa del ambiente, del agua y contra el fracking.
CONCENTRACIÓN: En mendoza 18:00 hs km0
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