Así explicaba Dauno Tótoro la situación en Chile
Hay que partir de la base que el Gobierno de Piñera se encuentra en una crisis política de proporciones, es un gobierno muy cuestionado y que además hay que sumarle que ahora se ve involucrado en los Pandora Papers por haber vendido la propiedad de la minera Dominga que se iba a construir, mediante paraísos fiscales para evadir impuestos. Pero además la venta estaba condicionada a que no se decretara como de interés de cuidado medioambiental el sector donde estaba la minera.
Esto ha llevado a que el Gobierno se vea muy debilitado. Se abrió también la posibilidad de una acusación constitucional en su contra, que parece una maniobra para fortalecer electoralmente a la oposición, porque si realmente estuvieran interesados en sacar a Piñera estarían convocando a movilizaciones y apoyando las que ya existen.
Pero, el Gobierno de Piñera en ese marco de debilidad extrema, evidentemente se apoya en la represión. Sobre todo en lo que ocurre en territorio mapuche, donde las empresas forestales vienen presionando desde hace mucho por mayores medidas represivas. El Wallmapu, o territorio mapuche, ya estaba militarizado pero ahora reforzaron esa presencia militar. Son imágenes realmente brutales de tanquetas, militares internándose en las comunidades. Es un escenario que adelanta una mayor represión para el pueblo mapuche.
Hay que tener en cuenta que la presencia del gran empresariado en la Araucanía, territorio mapuche, se expresa en las forestales, en la gran propiedad forestal de plantaciones de monocultivo de pino y eucalipto, sobre todo de pino. Y las grandes empresas forestales son propiedad de grandes empresarios que pertenecen a las diez familias más poderosas de Chile.
Además existe el conflicto con latifundistas, terratenientes ultra conservadores. El Estado, a través de militares y de la Policía, puso una especie de guardia privada para las empresas forestales, que no solamente arrebatan territorio mapuche sino que depredan el medioambiente. La forma de enfrentar esto es con una alianza entre el pueblo mapuche y trabajadoras y trabajadores del pueblo chileno.
Por ejemplo los profesores que este miércoles protagonizaron un gran paro. El Gobierno pide aplausos para los trabajadores de la salud, reivindica a profesoras y profesores pero a la hora de votar leyes favorables a los trabajadores de la educación o de la salud está en contra. El paro es porque de hecho Piñera vetó una ley favorable a la titularidad de profesores.
Ese veto generó un enorme descontento entre las bases docentes, lo que obligó al Colegio Nacional de Profesores a convocar al paro con una marcha que congregó a miles de docentes.
También hay conflicto en el sector de salud, porque se había contratado a profesionales en el marco de la pandemia, ahora que han bajado las cifras del covid-19 el Gobierno se dedicó a despedir a trabajadores y trabajadoras que habían sido contratados, y hay todo un movimiento en distintos hospitales a nivel nacional que se liga a la lucha contra la precarización enorme que hay en ese sector.
Hay algo muy importante: aunque ya no están las movilizaciones de la enorme rebelión popular, aún se mantiene viva en la subjetividad de la gente, de trabajadores que ahora se disponen a luchar.
Estas luchas cruzan el proceso electoral presidencial y de parlamentarios
Desde el Partido de Trabajadores Revolucionarios (PTR), junto con otras organizaciones estamos en un frente que presenta candidaturas en 10 distritos y apostamos principalmente a la candidatura de Lester Calderón, que es un trabajador, candidato a diputado por el distrito 10, que es el más céntrico de Santiago.
Porque buscamos poner en pie una izquierda que no se subordine a las trampas de lo que llamamos la “cocina parlamentaria”: esos acuerdos y arreglos por arriba a espaldas del pueblo. Como fue el “acuerdo por la paz” para frenar la rebelión popular.
Esto es importante porque el Frente Amplio, el Partido Comunista, se han subordinado a esas reglas del juego y esto se ha expresado claramente en la propia Convención Constituyente. Acá se dio la discusión del reglamento para su funcionamiento y votaron todos la regla de los dos tercios para que la convención apruebe medidas.
Esto en los hechos es entregarle poder de veto a los sectores neoliberales y de la derecha de la propia convención. A favor de eso votó el Frente Amplio, buscando moderar la discusión política.
Me parece que eso también explica que hoy haya sectores que están movilizándose, porque no se ven representados, en ese tipo de decisiones, sus propios intereses.
Porque es claro que dándole el poder a los sectores que administraron los 30 años de herencia pinochetista, que es lo que impugnó la rebelión popular, no vamos a conquistar las demandas o reclamos que se expresaron en la calle con esa rebelión.
Por eso nosotros planteamos la necesidad de avanzar en un plan de lucha que permita unificar las luchas que se están dando y si queremos sacar a Piñera la perspectiva tiene que ser la de una huelga general porque va a ser así, a través de esa lucha, que podamos sacar a este presidente criminal y conquistar nuestras demandas. | 
