El fin de semana, y como parte de las actividades de campaña del Frente de Izquierda Unidad, el candidato a diputado nacional Alejandro Vilca estuvo en un encuentro con trabajadores de la educación impulsado por la agrupación 9 de abril.

El sábado por la tarde Alejandro Vilca participó de un encuentro con trabajadores de la educación de distintos puntos de la provincia en la que se debatió e intercambió acerca de la pelea histórica para que por primera vez llegue un trabajador jujeño al Congreso Nacional; como también cómo dar pasos en la organización en el sector para sumar fuerza contra el ajuste en curso en perspectiva de recuperar los sindicatos para la lucha de los trabajadores.

Los y las presentes relataron cómo en las escuelas se expresa un descontento, bronca y malestar muy grande, aún con pasividad, por la situación económica crítica que se siente cada vez más debido a la inflación y los bajos salarios. Cómo esa realidad no sólo la sufren los trabajadores de la educación sino que también afectan a las familias de la comunidad educativa y a los estudiantes de los distintos niveles. Un profesor de secundaria señaló que “Morales habla de progreso pero en las escuelas recortan el comedor. Por ejemplo en donde trabajo a los chicos de taller no les dan merienda. La encargada de eso es Natalia Sarapura que va de segunda candidata de Morales y no garantiza la comida para los chicos que lo necesitan. Eso hay que denunciarlo.”

Otra profesora de escuelas nocturnas afirmaba lo dicho por su colega, planteando que “en las escuelas nocturnas tampoco hay comedor y son estudiantes que tienen necesidades, vienen de trabajar todo el día y van directo a la escuela. Es un doble discurso decir que están cambiando la provincia y en las escuelas pasan estas cosas”.
El intercambio expresaba que frente a las mentiras y doble discurso recurrentes de los partidos tradicionales, de la UCR y el PJ, la izquierda empieza a ser vista como una alternativa que defiende a los trabajadores y al pueblo humilde. Por eso se mostraba una preocupación por cómo llegar a más gente, desenmascarando esas mentiras y con propuestas claras del Frente de Izquierda, como la necesidad de un salario que no pierda más con la inflación y alcance la canasta familiar, una mayor inversión para la infraestructura de las escuelas y los elementos sanitarios, de limpieza y tecnológicos que no llegan y se tienen que hacer cargo las cooperadoras. “Hay que invertir las prioridades”, se debatió. No puede seguir estando primero el pago de deudas que el pueblo no adquirió por sobre el derecho a la educación, la salud, la vivienda y el trabajo. “En las recorridas por escuelas y terciarios hubo muy buena recepción y apoyo, se nota que hay cansancio y se ve bien a la izquierda”, aportó una docente al debate. A lo que se agregó que “es posible que podamos pasar de la bronca a la organización”.

Otro tema discutido fue la necesidad de unir los reclamos docentes a los de los estudiantes y la juventud como también las familias de las escuelas que también son trabajadoras. Un estudiante de profesorado describió como con la pandemia se aprovecharon los gobiernos para recortar derechos y oportunidades para los estudiantes. Por lo que decía que “estudiantes y docentes están en la misma lucha”.
Los recientes cambios en el Ministerio de Educación fueron analizados como un “nuevo engaño del Gobierno”, preocupado por recuperar votos en un sector que les empezó a dar la espalda.

Fue una reunión de trabajo en la que se debatió y pensó cómo llegar a más escuelas y barrios con las propuestas del FITU para la educación, dándole fuerza al boca en boca, el impulso de comités y convencer a más trabajadores para aprovechar una oportunidad histórica de arrancarles una banca a los poderosos, para fortalecer la lucha y la voz del pueblo trabajador jujeño. Para lograr ese objetivo también se discutió que es clave conseguir más fiscales convencidos de defender el voto de la izquierda, sabiendo que los grandes aparatos van a apelar a cualquier maniobra fraudulenta para evitar que un trabajador llegue al Congreso Nacional.

Todos estos debates y reflexiones se dieron en un marco de no sólo pensar la organización para la pelea política en las elecciones contra los poderosos y sus partidos, sino como parte de un plan de ganar fuerza y organización en cada lugar de trabajo para enfrentar las políticas de ajustes del gobierno nacional y provincial que buscan que la crisis la pague el pueblo trabajador. En ese sentido, se discutió la necesidad de expandir y hacer crecer a un alternativa de izquierda en los sindicatos docentes como la 9 de abril que plantea la independencia de todos los gobiernos y partidos patronales, la democratización profunda de los sindicatos para ponerlos al servicio de la lucha y terminar con la orientación servil que le dan las conducciones actuales o las que estuvieron antes que no son ninguna alternativa real.