Suely es auxiliar en el Hospital Barros Luco, parte de la agrupación de jóvenes estudiantes y trabajadores Vencer, y de la agrupación de trabajadores de la salud Abran Paso. Nació en Lo Espejo, en la población José Maria Caro, y desde que fue estudiante secundaria se ha caracterizado por ser una activa luchadora, peleando desde el 2011 contra la educación de mercado y por una educación pública, gratuita y de calidad, fue dirigenta estudiantil, durante la rebelión fue parte de los miles de jóvenes que protagonizaron las masivas movilizaciones en las calles, y posteriormente fue candidata a constituyente por el distrito 10 criticando las trampas de la convención.
Como muchos jóvenes que durante la pandemia tuvieron que ingresar a trabajar para ayudar a sus familias, para pagarse sus estudios, deudas como el CAE, o simplemente no pudieron seguir, Suely es una más que tuvo que entrar a trabajar y postergar sus estudios.
“Tuve que congelar y entrar a trabajar porque se me acabó la gratuidad, porque estoy endeudada con el CAE, que es una realidad que viven muchos jóvenes hoy en día, porque en este chile donde los empresarios son los dueños de todo, te tienes que endeudar para estudiar o hacer malabares para estudiar y trabajar al mismo tiempo”.
Estos trabajos a los que es arrojada la juventud, se caracterizan por los bajos sueldos y la sobrecarga laboral, como es el caso de comida rápida o el delivery donde hay que tomar muchos turnos para poder sacar un sueldo que alcance para vivir, o el caso de la salud donde trabajadores denuncian ser solo dos tens para una sala completa.
“Los trabajos a los que podemos acceder son precarios e inestables, en cualquier momento corres el riesgo de que te despidan, te imponen horas extras, te sobrecargan y quienes tienen contratos a honorario ni siquiera tienen derecho a acceder a licencias médicas, vacaciones o días administrativos, y al final quienes se enriquecen con nuestra precarización son los empresarios, de la educación, de la salud, de las cadenas de comida rápida y delivery”.
Ahora Suely se presenta como candidata a diputada en el distrito 13 por el Partido de Trabajadores Revolucionarios, en una lista compuesta por profesores y trabajadores de la salud, que pelean porque todo parlamentario gane lo mismo que un trabajador calificado y por una voz de la juventud y la clase trabajadora para que no sigan decidiendo los mismos políticos y partidos del régimen.
“Voy como candidata a diputada para pelear en contra de los político de los 30 años y los empresarios como Luksic que nos están robando el futuro, quienes fomentan los trabajos precarios, privatizan y desmantelan la salud y educación pública, destruyen el medio ambiente, nos reprimen, nos imponen como vivir nuestras sexualidades e identidades, nos criminalizan si fumamos marihuana y quienes estos últimos 30 años se han dedicado a mantener y profundizar la herencia de la dictadura militar”.
El llamado que hace Suely es a organizarse para que “no nos roben el futuro” y levantar una alternativa independiente a Boric, el Frente Amplio y el Partido Comunista “que confíe en la fuerza de la juventud y la clase trabajadora para enfrentar a la derecha, a Kast y a los empresarios, así como la represión de este gobierno y los miles de despidos que se están realizando en salud, a diferencia de quienes se han dedicado a hacer acuerdos con la ex concertación y la derecha y no ocupan sus tribunas para unificar y potenciar las luchas y demandas de estudiantes y trabajadores”.
“Junto a mis compañeres queremos transformar la rabia en organización, por eso vamos por una voz de la juventud trabajadora en el congreso que se proponga afectar el bolsillo de los grandes empresarios para financiar nuestras demandas y que pelee contra los trabajos precarios e inestables, por nuestro derecho a la educación pública, gratuita, de calidad y no sexista, por un sistema único de salud sin subsidio a las clínicas privadas, por el paso a planta de todos y todas, por la reducción de la jornada laboral para repartir el trabajo entre quienes tienen y quienes no, por sueldos y pensiones mínimas de 600mil, acordé a la canasta básica familiar, por el derecho a votar y ser electos desde los 14 años, por la derogación de todas las leyes represivas, por no mas crímenes de odio y discriminación hacia la diversidad sexual y por el derecho al aborto legal, libre, seguro y gratuito. ¿Por qué vamos a confiar en que un montón de políticos que solo se han dedicado a legislar en nuestra contra y en pos de los empresarios se van a preocupar de estas necesidades? Tenemos que tener nuestra propia voz ¡No dejemos que decidan por nosotras y nosotros!” |
